El premio nobel de la paz Muhammad Yunus, creador de un sistema de microcréditos para los pobres, dirigirá un gobierno interino en Bangladesh y se comprometió a celebrar elecciones próximamente, tras la disolución del Parlamento y la huida de la primera ministra Sheikh Hasina.
Yunus, que se encuentra en Europa y regresará a Bangladesh el jueves según sus servicios, escribió el miércoles en la revista británica The Economist que hará lo posible para que "se celebren elecciones libres y justas en los próximos meses".
"Necesitamos ante todo jóvenes que no estén obsesionados con saldar cuentas, como lo han estado muchos de nuestros gobiernos anteriores", declaró.
El economista de 84 años también hizo un "ferviente llamamiento a todos para que mantengan la calma". "Estén tranquilos y prepárense para reconstruir el país. Si tomamos el camino de la violencia, todo será destruido", indicó en un comunicado.
La decisión de "formar un gobierno interino" liderada por Yunus fue tomada en una reunión entre el presidente Mohamed Shahabuddin, los jefes militares y los líderes estudiantiles que encabezaron las protestas a principios de julio, indicó este miércoles la presidencia bangladesí.
"El presidente pidió al pueblo ayudar a superar la crisis. Es necesaria la formación rápida de un gobierno interino para superar la crisis", agregó en un comunicado.
Muhammad Yunus declaró el martes que estaba dispuesto a asumir la jefatura de un gobierno interino. "Siempre he puesto la política a distancia (…) Pero hoy, si es necesario actuar en Bangladés, por mi país y por el coraje de mi gente, entonces lo haré", expresó en una declaración escrita enviada a la AFP.
Yunus es conocido por haber sacado a millones de personas de la pobreza gracias a la entrega de microcréditos, una iniciativa por la que recibió en 1998 el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia y el premio Nobel de la Paz en 2006.
También se ganó la persistente enemistad de Sheikh Hasina, que lo acusaba de "chupar la sangre" de los pobres.
Nahid Islam, un dirigente del colectivo de estudiantes, confirmó la decisión a los periodistas tras una reunión de tres horas en la presidencia y calificó las conversaciones de "fructuosas".
El presidente Shahabuddin aceptó que el gobierno interino "se forme lo antes posible".
El jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, sostuvo que el nuevo gobierno deberá "respetar los principios democráticos, el estado de derecho y reflejar la voluntad del pueblo".
El presidente Shahabuddin disolvió este martes el Parlamento, una de las exigencias clave de los estudiantes, compartida con la principal formación de oposición, el Partido Nacionalista de Bangladesh (BNP), que exige que se convoquen elecciones en los próximos tres meses.
Sheikh Hasina, de 76 años, estaba en el poder desde hace 15 años, pero su último mandato como primera ministra, que comenzó en enero, estuvo marcado por el boicot de la oposición a las elecciones, que denunció que no fueron libres ni justas.
La policía pide "perdón"
Hasina terminó dimitiendo y huyó del país el lunes bajo la presión de una ola de protestas que comenzó a inicios de julio con un movimiento estudiantil en contra de un sistema de cuotas para los funcionarios, pero que derivó en una movilización más amplia contra el gobierno.
Un total de 432 personas murieron en las protestas, 10 de ellas el martes y 122 el lunes, según un recuento de AFP con base en fuentes policiales, gubernamentales y médicas.
El martes la situación fue menos tensa, aunque se registraron diez muertos, los comercios reabrieron y se levantaron el toque de queda.
El presidente Shahabuddin instituyó al jefe de la policía nacional y el ejército reestructuró este martes la cúpula militar y depuso a altos mandos considerados como cercanos a Hasina.
El principal sindicato de la policía pidió "perdón" por haber disparado contra los estudiantes.
La federación afirmó que los agentes policiales fueron obligados a "abrir fuego" contra los jóvenes y que después, fueron presentados como los "malos". También anunció una huelga para garantizar la seguridad de los efectivos.
A última hora del lunes, el jefe de Estado había ordenado la liberación de las personas detenidas durante las manifestaciones y de la principal política rival de Hasina, la ex primera ministra Jaleda Zia, del BNP, que estuvo años en arresto domiciliario.