El acuerdo comercial entre la Unión Europea y Mercosur volvió a encenderse en los días previos a la cumbre del G20 en Brasil. Este domingo, el presidente francés, Emmanuel Macron, aseguró que no firmará el pacto "tal y como está". Mientras, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, afirmó que es de "gran importancia económica y estratégica". ¿Se ratificará finalmente?

El acuerdo entre la Unión Europea y Mercosur, de nuevo en el centro del debate. 

Este domingo el presidente francés, Emmanuel Macron, aseguró en diálogo con su homólogo argentino, Javier Milei, que no firmará el acuerdo económico entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur en las condiciones actuales que conforman el pacto. 

En sus reuniones del fin de semana con el presidente argentino, Macron dejó claro “de forma muy sincera y muy clara que Francia no firmaría a día de hoy el acuerdo con Mercosur tal como está”. 

Adicionalmente, el líder francés añadió que no cree en el acuerdo “tal como se negoció”, por lo que pidió renegociarlo para encontrar un marco aceptable para todos. 

En paralelo, Macron subrayó que le consta que hay “varios países” que no están conformes con este acuerdo, y que incluso el propio Milei le dijo que “no estaba satisfecho” ni con el acuerdo ni “con el funcionamiento actual de Mercosur”. 

Las declaraciones del jefe de Estado francés se dieron desde el aeropuerto de Buenos Aires antes de salir hacia Río de Janeiro para la cumbre del G20. 

En contraste, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, se reunió también este domingo con el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, con quien discutió “sobre la relación UE-Mercosur. Un acuerdo de gran importancia económica y estratégica”, en vísperas de la reunión del Grupo de los Veinte. 

En ese sentido, la funcionaria europea defendió este acuerdo que lleva más de 20 años en negociaciones, tomando distancia de la postura de Macron. 

Brasil y Alemania buscan revivir el acuerdo

Otro político europeo que se muestra expectante sobre la firma de esta alianza es el canciller alemán, Olaf Scholz, quien también visitará Río de Janeiro como parte de la cumbre del G20.

Tanto Scholz como Lula, quienes se reunirán el próximo martes, han dejado claro su gran interés en no dejar morir este acuerdo. 

En 2023, el presidente brasileño y el canciller alemán ya se entrevistaron en Berlín y Brasilia y en ambas ocasiones destacaron la importancia de llevar a buen término el acuerdo, como parte central de sus intervenciones. 

Alemania continúa remando para concluir el acuerdo de libre comercio con el Mercosur y, según fuentes alemanas, es consciente de que ahora hay “nuevas resistencias” en Francia y también en Argentina. 

Sobre este tema, el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, aseguró hace unas semanas en diálogo con France 24 que "el acuerdo del Mercosur-UE tendrá que esperar un poco más", ya que reconoció que las cosas “van mejor, pero todavía no van lo bastante bien”.

Así pues, sin duda la cumbre del G20 a punto de empezar dará lugar a múltiples diálogos en torno a este inconcluso pero presente debate, reforzado ahora con fuerza por los líderes comerciales de cada bloque.

Los agricultores franceses protestan en rechazo al acuerdo

Mientras los líderes mundiales avivan las conversaciones sobre este pacto comercial, en Francia los agricultores del país aceleraron este domingo el ritmo de sus protestas, y dejaron claro su rechazo al acuerdo entre la UE y Mercosur. 

Dichas manifestaciones empezaron la semana pasada de forma esporádica en distintos lugares del país y, durante el transcurso de este domingo, ganaron fuerza con varios bloqueos en algunas vías que dan acceso a París. 

Al mismo tiempo, en otros puntos de Francia se han anunciado las llamadas ‘operaciones caracol’, en las que los tractores obligan al tráfico a circular muy lentamente. 

Arnaud Rousseau, presidente del principal sindicato agrícola, FNSEA, aseguró que "desde esta tarde y al menos durante 48 horas habrá acciones en casi 80 departamentos" de los 96 que hay en la Francia metropolitana. 

Sobre el acuerdo, Rousseau indicó puntualmente que los agricultores de toda la UE tienen una “posición común” en la denuncia de dicho pacto comercial, “incluso países que lo apoyan, como Alemania y España”.

En ese sentido, en el sector agrícola de Francia y otros países europeos se califica el pacto de “competencia desleal”, ya que permitiría la entrada en la UE de productos con condiciones fitosanitarias prohibidas en suelo europeo, como el uso de hormonas en la cría de ganado. 

Con EFE, Reuters y medios locales