Pasaron 67 días desde la renuncia del ex primer ministro Gabriel Attal y más de dos semanas desde que el derechista Michel Barnier fue anunciado como su relevo por parte de Emmanuel Macron. Este sábado, Alexis Kohler, secretario general del Elíseo, anunció la lista de ministros que conforma el nuevo Ejecutivo francés. Un ejecutivo que mira a la derecha y da la espalda a los resultados de las elecciones legislativas. En tanto, manifestaciones organizadas por el izquierdista Francia Insumisa, ecologistas y varias asociaciones tuvieron lugar este sábado el Gobierno Macron-Barnier.

Fumata blanca en Francia. Luego de más de dos semanas desde su nombramiento como primer ministro, Michel Barnier anunció a última hora de la tarde este sábado la composición de su nuevo gabinete, aprobado por el presidente Emmanuel Macron.

Un nuevo gobierno que mira al centro-derecha y la derecha clásica y da la espalda al voto de la mayoría de los franceses, que apostaron por el Nuevo Frente Popular de izquierdas que ganó las elecciones legislativas del 7 de julio sin mayoría absoluta. 

Michel Barnier empezó a llamar a sus nuevos ministros el sábado por la tarde, según fuentes del Elíseo. El inquilino de Matignon -la sede de Gobierno- tenía "plena libertad" para componer su equipo, aseguró Macron.

El presidente galo convocó al nuevo Ejecutivo a una reunión del Consejo de Ministros el lunes a las tres de la tarde, hora local.

¿Quién es quién en el nuevo gobierno francés?

Una de las piezas clave del nuevo Ejecutivo que simboliza ese giro ideológico a la derecha es el ministro del Interior, Bruno Retailleau, hasta ahora jefe del grupo en el Senado de Los Republicanos (LR, el partido de Barnier), conocido por sus posiciones particularmente duras en el terreno de la inmigración.

Entre los nombres que desgranó al comunicar la lista el secretario general del Elíseo, Alexis Kohler, hay también una única figura procedente de la izquierda, el que durante casi 22 años fue diputado socialista, Didier Migaud, designado para la cartera de Justicia.

Migaud era hasta ahora el responsable de la Alta Autoridad para la Transparencia de la Política, un organismo encargado de velar por la probidad de las personas que ocupan cargos públicos y desde el punto de vista jerárquico estará justo por debajo de Barnier en el gabinete.

En los dos ministerios con competencias de soberanía y en los que Macron en tanto jefe del Estado seguirá teniendo mucho qué decir, hay dos hombres conocidos por su proximidad con él.

En Defensa repite Sébastien Lécornu, mientras que en Asuntos Exteriores estará a la riendas Jean-Noël Barrot, lo que supone un ascenso para este hombre salido de una familia de políticos que en el Gobierno saliente se ocupaba de Asuntos Europeos.

Hay también varios nombres más que repiten en el nuevo Gobierno, como la titular de Cultura, Rachida Dati; Catherine Vautrin, que pasa de Trabajo a la cartera de Relaciones con los Territorios y de la Descentralización; o Agnès Pannier Runacher, que asciende a ministra de la Transición Ecológica.

Igualmente Geneviève Darrieussecq, que era en el Ejecutivo saliente ministra delegada para los Antiguos Combatientes, dependiente de Defensa, y que ahora pasa a ser la responsable de Sanidad.

El responsable de la cartera de Economía, Finanzas e Industria será un joven macronista de 33 años que era hasta ahora diputado, Antoine Armand.

No menos relevante en un momento crítico para las finanzas públicas francesas y a sólo unos pocos días de que se tengan que presentar los presupuestos para 2025 va a ser la figura del nuevo ministro de Hacienda, Laurent Saint Martin, que en su caso estará orgánicamente vinculado al gabinete del primer ministro, lo que dice mucho de la voluntad de Barnier de supervisar su trabajo de cerca.

Laurence Garnier, que al aparecer en una lista que corrió a partir del jueves como nueva ministra de Familia generó una importante polémica por sus posiciones pasadas en contra del matrimonio homosexual y en contra de la constitucionalización del aborto, finalmente entra en el Gobierno pero en un puesto relativamente menor, como secretaria de Estado de Consumo.

Reacciones a la decisión de Macron-Barnier

Las reacciones no se hicieron esperar. El líder de la Agrupación Nacional, Jordan Bardella, la mano derecha de Marine Le Pen, denostó la elección de los nuevos ministros y dijo que el Gobierno de Barnier "firma el regreso del macronismo" y "no tiene futuro".

Por su parte, el titular del partido de izquierda Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon, miembro asimismo de la coalición del Nuevo Frente Popular, dijo en su red social X que ya "se conoce el casting de la nueva película macronista sobre desastres. El gobierno de los perdedores de las elecciones legislativas está en manos del preocupante Ministro del Interior", afirmó en referencia al conservador Bruno Retailleau, quien adopta una línea firme en materia de inmigración, seguridad o respeto del laicismo. Retailleau también se opuso al matrimonio igualitario y al proyecto de ley sobre el fin de la vida propuesto por Emmanuel Macron

"Ni legitimidad ni futuro", aseveró Mélenchon sobre el recién nombrado gabinete.