La Cámara Alta del Parlamento ruso aprobó un proyecto de ley que prevé un aumento del 30% de los gastos militares el año próximo, en un momento en que el conflicto con Ucrania se recrudece. La ley aguarda la ratificación del presidente, Vladimir Putin. 

Se dispara de nuevo el presupuesto militar ruso. La Cámara Alta del Parlamento ruso, aprobó el miércoles 27 de noviembre un proyecto de ley de presupuesto de 2025 a 2027 que prevé un aumento de los gastos militares en un 30%.

Con este nuevo incremento, el presupuesto de defensa ruso alcanzará los 13.500 millones de rublos anuales, lo que equivale a unos 119.000 millones de euros, es decir un poco más del 6% del PIB ruso.

En total, al menos el 40% del presupuesto federal de 2025 se dedicará el año que viene al ámbito militar.

El proyecto de ley ya había sido aprobado hace una semana por la Duma, la Cámara Baja del Parlamento ruso. Ahora tiene que ser ratificado por el presidente Vladimir Putin, lo que se espera sea solo una formalidad.

Este año, el presupuesto militar ruso ya se había disparado considerablemente, con un aumento del 70%, lo que representa el 8,7% del PIB. Jamás el gasto militar de la República Federal había sido tan alto desde la caída de la Unión Soviética hace más de 30 años.

Un aumento del presupuesto en medio de la escalada entre Moscú y Kiev

Este incremento significativo de los gastos militares rusos ocurre mientras Rusia realiza un alto esfuerzo militar en el conflicto contra Ucrania desde hace casi tres años.

En los últimos días, se está viendo una nueva escalada en la guerra. Rusia prometió responder a los nuevos ataques con misiles de largo alcance estadounidenses ATACMS lanzados por Ucrania. El martes Rusia atacó a Ucrania con unos 188 drones, un récord desde el inicio de la guerra.

Desde 2022, el Kremlin ha reorientado en gran medida su economía hacia el esfuerzo bélico, desarrollando a gran velocidad su complejo militar-industrial, en particular mediante la contratación de cientos de miles de nuevos empleados.

Esta situación también se refleja en las declaraciones del ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov. En una entrevista publicada este miércoles en el diario gubernamental Rossíiskaya Gazeta, el jefe de la diplomacia rusa indicó que el conflicto en Ucrania no está cerca de terminarse.

“A juzgar por lo que está sucediendo en el campo de batalla, todavía estamos muy lejos de una solución política y diplomática de la crisis", opinó Lavrov.

En ese sentido, ningún elemento permite creer que estos gastos militares adicionales podrían bajar en los próximos meses. Al contrario: en septiembre, Vladimir Putin firmó un decreto para ordenar un aumento de casi el 15% del número de soldados, hasta alcanzar 1,5 millones.

Sin embargo, este esfuerzo de guerra también impacta el resto de la economía rusa. Esta estrategia alimentó la inflación, que se mantiene alrededor del 8,5%, lo que amenaza aún más el poder adquisitivo de los ciudadanos rusos, ya afectados por las sanciones occidentales contra el país.

 

Con AFP y medios locales