La fiesta de Navidad trae consigo muchos movimientos de personas y familias, en procura de compartir la noche del 24 de diciembre, en la tradicional cena que el mundo cristiano celebra como si se tratara de un rito religioso.
Muchas personas se mueven dentro de la ciudad, en procura de juntarse con familiares y amigos, y lo hacen luego de las celebraciones de un día que se considera festivo, en el que hubo tragos, almuerzos, entrega de regalos. Algunos se mueven con la ingesta de alcohol ya iniciada.
Otros se mueven fuera de la ciudad. Se van de la capital hacia un pueblo cercano. Y los que hacen largos trayectos, entre provincias, utilizan las carreteras. Los hay que tienen las precauciones adecuadas, manejan a la defensiva, pero hay otros que lo hacen con desenfado, celebrando, tomando algo de alcohol, y esa no es una actitud responsable.
Los accidentes en la festividad de navidad nos acechan. Por irresponsabilidad en el manejo, por manejo irresponsable, por conducir autos de cualquier tipo bajo los efectos de alcohol. Y llegan las tragedias.
Las autoridades tienen la responsabilidad de aumentar la protección, la vigilancia, y detener a todos los conductores que -tomados o no- manejen con exceso de velocidad. Y sin miramiento, impedirles que continúen manejando.
Se ha desplegado un operativo nacional con miles de agentes policiales, personal médico y paramédico, además de voluntarios de la Defensa Civil. Aspiramos a que la ciudadanía atienda los llamados a la prudencia.
Estas celebraciones hay que tenerlas en paz, con sobriedad, con responsabilidad y evitar los excesos en velocidad, en alcohol, en alimentos. El único exceso que se debe permitir es la alegría, sin que nadie corra riesgo.
En Acento deseamos felices fiestas de navidad a nuestros lectores, a los colaboradores, a quienes nos siguen por AcentoTV, los anunciantes que nos permiten sostener la empresa informativa, y a toda la sociedad, a la que respetamos y queremos, como parte de un país que necesita unas cuentas navideñas de tranquilidad y goce, de unidad y celebración responsable. De amor y paz.