Los presidentes ruso, Vladímir Putin, y turco, Recep Tayyip Erdogan, acordaron cumplir en su totalidad el acuerdo de exportación de cereal ucraniano y ruso, y también que Ankara pague en rublos los suministros de gas ruso, a lo que se oponen los países occidentales.
Ambas partes abogan por el "pleno cumplimiento" de los acuerdos de Estambul de forma que Rusia pueda exportar "sin obstáculos" su grano y abono, señala la declaración conjunta emitida tras las negociaciones entre ambos mandatarios y sus delegaciones.
Putin y Erdogan reconocen "el importante papel de las relaciones constructivas entre ambos países a la hora de suscribir la iniciativa sobre el suministro seguro del cereal desde los puertos ucranianos".
Al comienzo de su reunión en el balneario de Sochi (mar Negro), Putin agradeció a Erdogan su papel en la firma de dicho acuerdo, que consideró "muy importante" en el marco de la crisis alimentaria mundial.
El carguero Razoni, el primero en zarpar de territorio ucraniano, llevó el lunes 26.500 toneladas de maíz desde Odesa al Líbano cruzando el estrecho de Bósforo.
Según informaron las autoridades turcas, otros tres buques debían partir el viernes desde los puertos ucranianos de Odesa, Chornomosk y Pvidenny.
A su vez, el viceprimer ministro ruso, Alexandr Novak, desveló que los líderes ruso y turco habían acordado que Ankara comience a pagar "parcialmente" el gas en moneda rusa.
"Estamos pasando gradualmente al pago en la divisa nacional. Parte de los suministros se pagarán en rublos. Esto es, efectivamente, una nueva etapa que abre nuevas posibilidades", explicó.
Recordó que Rusia suministra anualmente 26.000 millones de metros cúbicos de gas a Turquía.
Putin comentó hoy que "los socios europeos deben estar agradecidos a Turquía porque garantiza el tránsito fluido de nuestro gas al mercado europeo".
"El Turkish Stream, a diferencia de todas las demás rutas de nuestros suministros de hidrocarburos, funciona correctamente, de manera dinámica, sin fallos (…), se ha convertido en una de las principales arterias de abastecimiento de gas ruso a Europa", resaltó.
En su declaración conjunta, Moscú y Ankara defendieron la integridad territorial de Siria, al tiempo que se mostraron dispuestos a coordinar sus esfuerzos en la lucha contra las organizaciones terroristas.
Según informó el Kremlin, los mandatarios se proponían tratar hoy la situación en Siria, para lo que también ha viajado a Sochi Hakan Fidan, el jefe del servicio de inteligencia turco.
Erdogan quiere conseguir el visto bueno de Putin para una nueva operación militar turca en el norte de Siria contra las milicias kurdas, las Unidades de Protección Popular (YPG), que viene anunciando desde hace semanas.