El mes de noviembre es sinónimo de ofertas y descuentos, con promociones atractivas que prometen a los consumidores los mejores precios del año. Sin embargo, este período, conocido por eventos de ventas masivas como el Black Friday, no solo atrae a compradores ansiosos, sino también a prácticas comerciales que pueden ser perjudiciales y, en algunos casos, rozar la ilegalidad.

Los vicios ocultos en los productos son uno de los mayores riesgos para los consumidores. Muchas veces, los artículos vendidos con grandes descuentos presentan defectos que no se mencionan en la publicidad ni se destacan durante la compra, ya sean fallos en electrodomésticos, teléfonos móviles con problemas de fábrica o ropa de calidad inferior a la prometida, estos defectos suelen aparecer después de que el comprador ha realizado la transacción, dejando a los consumidores frustrados y, en muchos casos, sin las garantías adecuadas para solucionar el problema.

Por otro lado, la publicidad engañosa es otra preocupación latente. Numerosas tiendas anuncian descuentos aparentes que, al analizarse con detenimiento, no son lo que parecen. Estrategias como inflar los precios días antes del evento para luego aplicar “descuentos” o presentar ofertas limitadas que no se corresponden con el inventario real son ejemplos de tácticas que desorientan al comprador. Estas prácticas no solo atentan contra la buena fe del consumidor, sino que también generan desconfianza hacia las marcas y los comercios.

Muchas tiendas aprovechan las ventas masivas de noviembre para sacar mercancías que no solo presentan defectos, sino que también son modelos obsoletos, ofreciendo aparentes descuentos atractivos que, en realidad, no representan un ahorro real para el consumidor. En muchos casos, estos artículos con tecnología desactualizada o características limitadas se disfrazan como grandes ofertas, cuando en realidad no justifican el precio promocional. Además, se ha observado que, apenas tres semanas después de terminar noviembre, los artículos verdaderamente nuevos y con mejor tecnología suelen aparecer en el mercado a precios más bajos, dejando a los consumidores que compraron en la temporada de descuentos con la sensación de haber pagado de más por productos que no lo valían.

Para protegerse, los consumidores deben ser más críticos y cautelosos. Comparar precios antes de las promociones, leer las condiciones de las ofertas y asegurarse de que las garantías sean claras y efectivas son acciones indispensables. Al mismo tiempo, las autoridades deben redoblar esfuerzos para vigilar y sancionar las prácticas desleales, garantizando que los comercios actúen con transparencia y responsabilidad.

Este noviembre, los compradores deben disfrutar de las ofertas, pero sin bajar la guardia ante posibles engaños. La clave está en ser un consumidor informado, que sepa distinguir las buenas oportunidades de las ofertas con vicios ocultos y publicidad engañosa.

Los consumidores tienen derechos claros ante situaciones de vicios ocultos, defectos y publicidad engañosa. Entre estos derechos destacan el derecho a la información veraz y clara sobre los productos y servicios, el derecho a la protección contra prácticas comerciales abusivas, y el derecho a la reparación, sustitución o devolución de productos defectuosos. Además, los consumidores tienen el derecho a recibir garantías adecuadas, el derecho a la seguridad en los bienes que adquieren, y el derecho a presentar reclamaciones y obtener soluciones eficaces.

Ante cualquier irregularidad, pueden acudir a Pro Consumidor, la entidad encargada de proteger sus intereses, donde se ofrecen servicios de mediación y asesoría para resolver conflictos.

Recomendamos a Pro Consumidor que no postergue la implementación de medidas adicionales para proteger a los consumidores, especialmente durante los períodos de alta actividad comercial como noviembre. Es crucial que se intensifiquen las campañas informativas para educar a los ciudadanos sobre sus derechos y que se promuevan las líneas telefónicas de atención y los canales de denuncia, facilitando así el acceso rápido y eficiente a los mecanismos de reclamo. La vigilancia y respuesta inmediata a las quejas ayudarán a prevenir fraudes y a garantizar una experiencia de compra más segura y justa para todos.

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Tu Consultorio Financiero es una columna desarrollada por Jesús Geraldo Martínez sobre finanzas personales, para orientar a las personas con conocimientos básicos en finanzas y economía a mejorar su entendimiento. Para consultar con el autor puede escribir al correo jesusgeraldo@tuconsultoriofinanciero.com, o en Instagram @Jesusgeraldomartinez.