El ministro de Energía y Minas, Joel Santos, consideró que la transición energética debe ser acelerada, ante los efectos cada vez más evidentes del cambio climático. Además, es esencial que cada nación adopte medidas adecuadas a sus circunstancias específicas.
En el caso dominicano, resaltó que el Gobierno trabaja intensamente en diversificar la matriz energética, con el fin de reducir la dependencia de los combustibles fósiles y promover el uso de energías renovables.
Santos habló en esos términos, al participar en el panel “Perspectivas del desarrollo energético en el Caribe” en la IX Semana de la Energía, de la Organización Latinoamericana de Energía (Olade), que se desarrolla en Paraguay, hasta este 1 de noviembre.
“Es crucial que nuestras políticas y regulaciones energéticas se alineen con las realidades ambientales actuales. Necesitamos avanzar hacia un modelo más sostenible, que no solo beneficie a nuestra economía, sino, que también proteja nuestro entorno", afirmó Santos.
Precisó que las normativas deben reflejar las exigencias de un mundo cada vez más digitalizado y tecnológico, lo que, a su juicio, no solo atraerá nuevas inversiones, también fomentará la innovación en energías renovables y ampliará la matriz, haciéndola resiliente y flexible.
Santos recordó que, en el pasado reciente, el 80% de la generación eléctrica del país provenía de combustibles derivados del petróleo, mientras que en la actualidad esa proporción ha disminuido a alrededor del 20%. "Hemos logrado avances significativos en la matriz energética. Este cambio es esencial para reducir nuestra huella de carbono y asegurar un futuro más sostenible", destacó.
Además, el ministro resaltó la necesidad de hacer las infraestructuras más resilientes frente a fenómenos atmosféricos. "La ubicación geográfica de nuestros países nos hace vulnerables a huracanes y otros desastres naturales. Debemos invertir en tecnologías que fortalezcan nuestras infraestructuras y las hagan más robustas", manifestó.
Fue enfático en indicar que, “las políticas energéticas de la nación dominicana deben estar orientadas hacia un cliente cada vez más exigente, un mundo cada vez más digital y un clima más cambiante, lo que nos obliga a hacer de los procesos más simples, eficientes y flexibles, para poder reaccionar más rápido a las demandas del mundo de hoy”.
El ministro propuso fortalecer a la Organización Latinoamericana de Energía (Olade) como un ente facilitador de políticas y proyectos que promuevan la cooperación regional.
"Olade puede jugar un papel fundamental en la coordinación de esfuerzos entre los países caribeños, asegurando que compartamos buenas prácticas y recursos", añadió.
"Mientras nuestra economía crece anualmente alrededor de un 5%, la demanda eléctrica cuenta con un ritmo de crecimiento de un 8% este año. Esto plantea un desafío significativo que debemos abordar con urgencia", explicó el ministro.
Con estas iniciativas, Santos reafirma el compromiso de la República Dominicana con un futuro energético sostenible y resiliente, no sólo en beneficio del país, sino, también, fomentando las inversiones, especialmente para el desarrollo de energías renovables y así contribuir al bienestar de toda la región caribeña.