El sector de la construcción se está paralizando. Así lo advirtió Eliseo Cristopher, presidente de la Confederación Dominicana de Micro, Pequeñas y Medianas Empresas de la Construcción (Copymecon), al hablar sobre el aumento “desconsiderado” de los materiales de construcción.
En conversación con ACENTO, Cristopher expresó que, aunque desde el mes de septiembre hay algunos materiales que han bajado de precio, la realidad es que cuando se compara la baja con el alza no ha habido una reducción significativa.
Explicó que, tanto la pandemia como el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania hicieron que los materiales aumentaran en casi un 200 % y con ello el precio de las viviendas se elevara entre un 12 % y 20 %.
“El sector nunca entendió por qué habían aumentado tanto y la otra es que el sector de la construcción se está paralizando. Ya no se está viendo en las ferreterías ese flujo de clientes como se estaba viendo en días pasados. Ahora, con el tema de la demanda y la oferta, hay que ver cuál va a ser el comportamiento de los precios de los materiales, pero está mucho más lento, situación que nosotros vemos con mucho pesar”, lamentó.
El pasado 2021, el sector de la construcción cerró con un crecimiento por encima del 24 % y este año, al mes de agosto, el crecimiento es de aproximadamente un 4 %, por debajo de la media nacional.
“Habíamos dicho anteriormente de que si se mantenían esas condiciones íbamos a tener un sector mucho más lento, mucho menos dinámico”, sostuvo Cristopher.
Los precios de los materiales
De acuerdo con el último reporte del Índice de Costos Directos de la Construcción de Viviendas correspondiente al mes de septiembre publicado por la Oficina Nacional de Estadísticas, las principales disminuciones se presentaron en la madera, con un -6.76 %; ascensor, con un -6.33 % y tuberías y piezas de PVC, con un -5.81 %.
El acero bajó un -5.23 %, las herramientas un -3.16 %, los alambres eléctricos un -2.07 % y el subcontrato de herrería un -1.83 %.
Mientras que los principales incrementos se presentaron en los módulos, contadores y breakers, con un 2.03 %; seguido por los agregados, con un 1.44 % y los equipos y aparatos instalaciones hidro-sanitarias, con un 1.25 %.
Pero en sentido general, según el índice, en los últimos 12 meses los costos de construcción han aumentado un 14.19 %.
“Los materiales se han movido un poco a la baja, los constructores estamos contentos porque entendemos que ese tema puede ser una tendencia a la baja. No vamos a esperar que los precios estén a como estaban anteriormente pero también la tendencia puede seguir a la baja”, manifestó el empresario de la construcción.
Aseguró que si los precios de los materiales bajan, el de las viviendas debería bajar también. No obstante, explicó que ese efecto no se siente en estos momentos porque la construcción no es como el comercio diario, que desde el precio de los alimentos baja el que compra lo adquiere al nuevo precio.
“En la construcción, si bajan los precios en las ferreterías, le decimos bájame los precios que bajaron y lo que me dicen es ‘yo lo compré caro, tengo que colocarlos caro’, situación que yo no entiendo, porque si suben, ellos lo suben – los materiales – de manera inmediata. Pero cuando bajan, entonces tienen que esperar salir de la mercancía que compraron para uno poder acceder a los precios de la baja”, explicó.
Proyecciones para 2023
Si la situación se mantiene como va, Eliseo Cristopher no ve un año muy halagüeño o favorable para el 2023.
“Si los materiales de la construcción se mantienen en el alza y los recursos se quedan tan altos y no buscan un mecanismo entonces tendremos un año negativo para el año 2023. Hemos visto que el FMI, BDI y otros tienen proyecciones de una economía que se está reduciendo a nivel global y el sector construcción es uno de los más afectados en ese término”, señaló.
Dentro de las propuestas que hace desde Copymecon para cambiar el rumbo del sector el año que viene, está aumentar el gasto de capital en obras, es decir, que desde el Gobierno se promuevan más obras.
Asimismo, aunque el Banco Central mantenga su política restrictiva, propone que las entidades financieras y bancarias desarrollen espacios o programas especiales para mover a todas los micros, medianos y pequeños constructores a nivel nacional.
“Siempre hay que buscar mecanismos para que el sector constructor dentro de las crisis sea uno de los más movidos…Recordemos que es histórico que cuando el dinero está más caro las construcciones se paran y el dinero está muy caro en este momentos”, concluyó.