La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) bajó de 5.3 % a 5.1 %, la proyección de crecimiento económico para la República Dominicana en este 2022, y proyecta que para el 2023 disminuirán a 4.7 %.
En un comunicado de prensa, la CEPAL explica que para 2022 se espera un crecimiento de 3,2 %, América Latina y el Caribe, superior al indicado en agosto pasado.
Sin embargo, para el próximo año se prevé que la desaceleración se acentúe en con un crecimiento de 1,4% en 2023, en una coyuntura sujeta a importantes restricciones tanto externas como domésticas.
El organismo atribuye al conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, afectar negativamente el crecimiento global -y con ello la demanda externa que enfrentó la región este año- junto con acentuar las presiones inflacionarias, la volatilidad y costos financieros.
Basado en el crecimiento del producto interno bruto (PIB), para 2023, la CEPAL señala que la mayor aversión al riesgo, junto a la política monetaria más restrictiva por parte de los principales bancos centrales del mundo, perjudicó los flujos de capital hacia los mercados emergentes, incluyendo América Latina, además de propiciar depreciaciones de las monedas locales y tornar más onerosa la obtención de financiamiento para los países de la región.
Según la CEPAL, en 2023 los países de la región se verán nuevamente enfrentados a un contexto internacional desfavorable, en el que se espera una desaceleración tanto del crecimiento como del comercio global, tasas de interés más altas y menor liquidez global.
SE recuerda que el Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé que los países latinoamericanos cierren 2022 con un déficit de media del 4,7 % respecto al Producto Interior Bruto (PIB).
En su informe sobre "vigilancia fiscal" el organismo financiero también prevé que el déficit medio en la región se reduzca a un 4,2 % del PIB en 2023 y a un 3,4 % en 2024.