Marco general

Quizás podamos anotar dos hechos relacionados de forma directa e indirecta con la intervención del 1916 por parte del ejército norteamericano en suelo dominicano: de un lado la aplicación inicial de la política Monroe, América para los americanos, auspiciada por Monroe en los años donde se inicia o define una geopolílitica hacia el continente americano desde Estados Unidos, y la segunda gran razón de esta ocupación, diríamos, podría estar relacionada con el no pago de los intereses de la deuda externa con la banca norteamericana que había adquirido traspasar el endeudamiento público del gobierno dominicano, al sistema financiero de Estados Unidos, comprando dicha deuda a la Harmont Corporation y era como parte de una estrategia que perseguía primeramente una dependencia económica, para que luego se transformara en una dependencia política.

Antecedentes

Con un tratado comercial auspiciado por Ulises Heureaux con los Estados Unidos en 1891, en medio de una confrontación con su otrora mentor Gregorio Luperón para las elecciones celebradas en 1888 y  que enfrentaron a ambos líderes entre otras razones por la prolongación a cinco años del período presidencial y acusaciones de violaciones por parte de Heureaux a que se realizara con respeto e igualdad, el proceso electoral finalmente violado por este último. Ante estos hechos, Heureaux procuró abrirse camino en mejorar el debate interno que llevó incluso a la salida forzada del escenario político al líder indiscutible de la Guerra de la Restauración, Gregorio Luperón, quien terminó en un autoexilio en Saint Thomas.

Esta iniciativa de comercio con los Estados Unidos por parte del gobierno de Heureaux, originó suspicacia entre los prestatarios y gobiernos europeos, pues podría ser, como efecto fue, el inicio del alejamiento de la banca y comercio europeo, con el endeudamiento y flujo comercial dominicano. Al que se sumaba la opinión europea, ante la creciente política de expansión norteamericana que ponía en peligro sus intereses comerciales y geopolíticos en sentido general, en dicha zona.

Debido a la quiebra registrada por la compañía holandesa prestataria, Estados Unidos entra como comprador de sus acciones y conecta sus clientes a través de la Santo Domingo Improvement Co., en 1893, facilitándole al gobierno de Lilís, otro préstamo, que aceleró su tiranicidio el 2 de julio d 1899, era de 29 millones de dólares con esa banca norteamericana.

El endeudamiento registrado en los finales del régimen de Lilís, acompañado de la emisión de las papeletas de Lilís, como se conocía popularmente la emisión de papel moneda inorgánico que empeoró las finanzas públicas y la popularidad del gobierno, sumado a una creciente inestabilidad política con dos acciones militares, que, aunque no resultaron exitosas, se sumaron al creciente debilitamiento del régimen, culminando con el fusilamiento de Ulises Heureaux en Moca el 26 de julio de 1899, generándose un gran vacío político que terminó con un aumento del caudillismo, un desajuste de la economía, un caos social y el debilitamiento de la economía nacional que preocupó grandemente a los acreedores norteamericanos que comenzaron a buscar salidas a su endeudamiento.

El camino hacia la ocupación de 1916

Ante el desorden administrativo y político del país los Estados Unidos promueven la Convención de 1905 con el objetivo de comprometer al gobierno dominicano al pago de los intereses de la deuda con la banca norteamericana, y con ello y a través de este acuerdo, controlar las aduanas nacionales para garantizarse el pago de los intereses pendientes y los nuevos generados por esta deuda internacional.

Si bien constituye una fase inicial de perdida de la soberanía no lo fue en términos reales, pues todavía eramos soberanos como territorio y algunas de nuestras instituciones y símbolos patrios ondeaban por doquier como la bandera nacional y otros órganos e instituciones públicas. Bueno es destacar, que esta Convención hubo de ser ratifica en 1907 por incumplimientos del país y del lado estadounidense, garantizar o ratificar su cumplimiento.

En medio de esta  situación en la que el propio presidente norteamericano de la época Woodrow Wilson, mediaba ante los conflictos internos que no terminaban de solucionarse, finalmente y como resultado de las elecciones de 1914 ganadas por un margen estrecho por Juan Isidro Jimenes en contra de Horacio Vasquez, factor de cuestionamiento del perdedor, trajo consigo, conflictos de legitimidad al sufragio.

Pero fue tal vez la posterior confrontación con el caudillo liniero, Desiderio Arias, el detonante de una posición norteamericana ya tomada en Haití el 28 de julio de 1915 cuando tropas de la marine norteamericana ocupan este territorio y debido a lo intensa e irresoluta lucha entre el grupo de Jimenes y de Desiderio Arias, el buque insignia norteamericano Dolfin, bajo el mando del contraalmirante William Caperton, llega a Santo Domingo el 13 de mayo de 1916, desde Haití, sumándose a esta acción de ocupación, barcos procedentes de Guantánamo, Cuba.

Como vemos razones externas de expansión, geopolítica y económico/comercial, estuvieron detrás de las acciones militares norteamericanas bajo el mando del ministro norteamericano William Russell y el gobierno norteamericano de Wilson Woodron, pero razones internas de desangramiento y luchas intestinas por el control político del estado, de parte de los lideres más destacados de la vida política nacional de ese momento, causaron una grave debilidad institucional, una herencia caudillista del siglo XIX seguía aposentada en la vida política nacional, y una falta de definición de un proyecto de nación de su clase política y dominante. Todo esto, en el marco de una política expansionista de los Estados Unidos, se convertía en caldo de cultivo para el reparto de una parte del Caribe, que nos incluyó igualmente a nosotros.