¿Río o playa? Sintoniza la frecuencia. Podría hacerse un programa interactivo de radio (de dos o tres horas) con todo lo que dice la gente al momento de elegir entre estos dos destinos. Una elección que, sin dudas, lo pondrá en ruta para disfrutar de un día placentero y agradable porque inevitablemente estos destinos están relacionados con la recreación, el ocio y la felicidad de los seres humanos.
Para algunas personas será bastante fácil elegir, porque todo dependerá de lo “que me quede más cerca” con tal de gastar menos gasolina; otros tendrán una diatriba interior titánica, pues la elección dependerá de su estado emocional asociado al bienestar peculiar que genera la madre naturaleza, ya que el mar ofrece una experiencia muy distinta a la que se vive en un río, sea caudaloso o no. Creo que muchas personas prefieren destinos de agua dulce, porque pueden ver la ribera del río, lo cual quizá le transmite cierta sensación de seguridad, pero sobre todo porque hay más sombras que en las playas. Sí: el dominicano en general le huye al sol, sin importar el lugar o el destino elegido. Lo tengo ya comprobado.
Ahora bien, en sentido ordinario, lo fundamental es el agua, sin la cual no hay vida, un recurso muy valioso y que conviene cuidar a toda costa. Es la base del turismo; resulta difícil pensar en una experiencia turística verdadera y memorable sin que haya agua. Por eso la gran mayoría de hoteles tienen piscina; la gente busca la cercanía con el agua y las vibraciones de la frescura: lago, río, presa, embalse, cenote, etc. ¿Por qué? El agua relaja, causa placer, dinamiza los músculos y flexibiliza la mente. De hecho, el agua es una excelente herramienta para aliviar los dolores del cuerpo a través de la terapia acuática.
La terapia acuática o hidroterapia es un tipo de tratamiento que utiliza el agua para relajar y fortalecer las articulaciones, aliviar posibles dolores y promover el movimiento corporal.
En lo particular y lo personal, me encantan los ríos. El río más emocionante y maravilloso que he visitado es Cola de Pato, un río con un topografía salvaje, singular, ideal para la aventura y para liberar los demonios interiores y los miedos.
El río es un misterio existencial y humano: todos los ríos nacen en las alturas, en las montañas, en las entrañas más profundas de la naturaleza y en medio del bosque. De ahí que los ríos sean el escenario paradigmático para revivir y tener experiencias de turismo ecológico, cuyo contacto con la naturaleza es el elemento primordial e indispensable. Además, el río está asociado a la memoria, a los deseos más profundos, al paso del tiempo y las adversidades de la naturaleza misma contra las que lucha el hombre para superarse y mejorar su condición. El río sigue siendo la mejor metáfora de la conciencia humana, sus corrientes y aspiraciones.
Cola de Pato —así se llama porque su charco más profundo y grande se asemeja a la cola de un pato, nada que ver con W. Disney— es un paraíso, hermoso, mágico, con un relieve serpentino y misterioso, con agua cristalina y sorprende por su color azul turquesa. Se halla escondido, en el mismo corazón de las hermosas montañas y la cordillera septentrional, en un lugar llamado Arrollo Frío, en el municipio de Jamao al Norte, Provincia Espaillat. Por cierto, muy cerca de allí aún está en pie la casa de campo del ex presidente Antonio Guzmán. ¿Lo sabían?
Este río es un paraíso natural y todavía virgen, es inaccesible para muchas personas, debido a que la mayoría por lo visto no sabe de su existencia, ya que no hay manera de que una persona llegue solo o por su cuenta. Sin embargo, el factor determinante es que no todas las personas están dispuestas a pagar el precio del sacrificio. Para llegar al lugar hay que caminar unos 10 kilómetros, lo que implica descender una pendiente, deslizarse entre rocas, árboles, quebradas y escalar una montaña bastante empinada. Es una aventura y el cañón donde la adrenalina se anida.
Hay otros ríos hermosos y que puedes visitar cuando quieras escaparte de la loca y desquiciada de la casa, que en realidad es la rutina diaria. A mi juicio, estos son los mejores ríos, el top 5, en otro momento tendré que escribir sobre cada una de estas maravillas:
- Río Cola de Pato (Provincia Espaillat)
- Río Partido (en Salcedo)
- Río Nizao (los charcos, en Los Cacaos, San Cristóbal)
- Río Sonador en Puerto Plata
- Río Mulito (en Pedernales)
Ya he ido a Cola de Pato varias veces, siempre que voy descubro algo nuevo; aquí te dejo el video de la primera vez que lo visitamos con el equipo de Quieroloma. Fue una experiencia emocionante y digna de contarse: https://www.youtube.com/watch?v=tHzMSkJ2t0c
Cola de Pato es el río que yo prefiero. ¿Cuál es el tuyo? Puedes decirme en los comentarios. A lo mejor no lo conozco, y así tengo la oportunidad de seguir explorando.