Ramona (2023) es la última experiencia fílmica de la cineasta dominicana Victoria Linares Villegas. Se trata de una propuesta innovadora y experimental que trata lo rodado sin recetas sanadoras e infantilismos edulcorantes. Híbrida entre documental y matices de ficción aborda el embarazo adolescente, la real epidemia durante décadas en la República Dominicana.
Conmueve Ramona, pero no desde la piedad, sino desde la honestidad sin que no deje de subyacer una serie de imágenes lúdicas y amargas. “Una normalidad” aceptada no deseada. Sonrisas y miradas de picardía, ternuras y desesperanzas.
El espacio Crónicas de la Bohemia , que suscribo en el digital Acento, entrevistó a la directora Victoria Linares Villegas , para hablar sobre Ramona.
Es evidente que Ramona es un homenaje a lo femenino, tanto en la fuerza telúrica del género como el “valor con cojones” (como bien señala una de las muchachas) que la mujer debe tener para resistir en los trópicos que nos tocó vivir. Sin embargo, lo masculino (los que aportaron a la fecundación de esas barrigas adolescentes) son invisibles y no son señalados como “culpables”.
Para mí es bastante evidente que al hombre/niño se le permita jugar y a la mujer/niña no. Es algo incluso que está profundamente arraigado en la consciencia y en las elecciones más contundentes de estas chicas. Desde sus pensamientos sobre el aborto hasta como deben ellas de tratar a los hombres o los hombres a ellas. No era necesario tenerlos físicamente si estaban en cada una de sus respuestas. ¿Por qué la perspectiva de ellos? En esta película operaba eso por debajo de toda acción. Darle protagonismo físico al hombre era volver al terreno de desigualdad que viven, pero desde la imagen.
Cuando la protagonista (Camila Santana) baila con el potencial amante (Anderson Mojica) ante las muchachas, todas disfrutan la seducción y la posible cópula a final del baile. Es decir, hay un disfrute, una gozadera sin medir consecuencias.
Esa escena supone para mí una ruptura de mi pensamiento con las de ellas. Aquí ellas me muestran que nunca podré pensar o hacer un personaje cercano a ellas. Y que esa escena desde mi pluma y perspectiva hubiera sido un tanto sonsa. Quizás la hubiera infantilizado en sus acciones. Las chicas en cambio me demostraron picardía, dominio y sobre todo un conocimiento de como navegar y sobrevivir sin ahogarse en un mundo de desigualdad.
Los sectores sociales medios y altos poseen en mayores ventajas y “aceptación” del “niño o niña que vendrá” sin mayores consecuencias.
La película propone con el personaje de Camila, una chica de clase media, preguntarse quienes somos para contar la historia del otro que preocupa pero que es ajena al entorno de uno, a nuestra vida y posición de privilegio.
Reparto
El reparto se compone de actores profesionales y una selección de adolescentes de barrios marginados. La producción de Ramona estuvo a cargo de Rafael Llaneza & Pedro García (Sky Films) y Jordi Gassó (Lantica Media). En febrero de este año, Ramona se estrenó en el circuito internacional en el destacado ¿Festival de Cine de Berlinale como selección oficial de la sección Generationy
Se filmó a finales del 2021 en los estudios de Pinewood República Dominicana y en las comunidades de Haina, Gualey y San Pedro de Macorís.
Ramona se exhibe actualmente en la sala Fine Arts de la plaza Novo Centro de Santo Domingo. En el interior del país consultar la cartelera: Multiplaza Higüey en el municipio de Higüey
La filmografía de Victoria
La joven cineasta ha mostrado músculos. Éstas son sus propuestas desde el 2018. El drama Cállate Niña, el documental animado Mi Madre Me Tiene Rabia, Lo que se hereda (documental) y ahora Ramona (2023)
Vayan a verla. Apoyen el cine dominicano. Poco a poco se llega a lo que deseamos. Ramona es otra oportunidad para debatir el presente y futuro del cine dominicano.
José Arias en Acento.com.do