Afortunadamente nuestras expectativas no fueron elevadas, tal vez por eso no nos afectó tanto una historia tan ineficaz y carente de sustancia. The Lost City es supuestamente una “comedia romántica de aventuras” y en realidad tiene muy poco de comedia, muy poco de romántica y muy poco de aventuras. Los guionistas apostaron todo a la química en pantalla de sus protagonistas y el resultado es una historia deshilvanada cuyo único propósito es colocar en un mismo lugar a dos iconos del género Rom Com.
El filme fue dirigido por los hermanos Aaron y Adam Nee, prácticamente desconocidos en el medio, cuya nimia filmografía se resume a dos o tres títulos de bajo perfil, quienes además coescribieron el guión. Los hermanos Nee, desperdiciaron una oportunidad de oro para crear una comedia de acción memorable con tan solo haber dispuesto de una trama de acción enérgica y rítmica salpicada de gags cómicos y haber cerrado el círculo con un trasfondo romántico entre dos protagonistas de primer orden, en su lugar, la narración languidece por la falta de una mano firme y una historia coherente.
The Lost City narra la historia de Loretta Sage (Sandra Bullock), la autora de una serie de novelas románticas a quien la inspiración se le ha agotado. Loretta en medio de una crisis creativa y para colmo, está siendo presionada por su editora Beth Hatten (Da´Vine Joy Randolph) para que inicie una gira promocional del último libro de la serie conjuntamente con el modelo de portada de sus libros Alan Caprison (Chaning Tatum) quien está secretamente enamorado de la escritora.
El multimillonario Abigail Fairfax (Daniel Radcliffe) secuestra a Loretta porque descubrió que ha basado sus libros en investigaciones reales hechas por ésta y su difunto esposo arqueólogo y tiene la certeza de que Loretta puede ayudarlo a descifrar la ubicación de una valiosa diadema de piedras preciosas perdida en una remota isla del atlántico.
Cuando Beth y Alan se dan cuenta del secuestro, contratan a un ex SEAL experto en rescates y extracciones, Jack Trainer (Brad Pitt). Luego de ubicar la isla en la que se encuentra Loretta, Alan y Jack acuerdan reunirse para planear su rescate. Este es el preámbulo para justificar que Alan y Loretta se encuentren solos y perdidos en una isla selvática tratando de escapar de los matones de Fairfax.
La película es fallida en muchos niveles, aunque el más importante de todos es el guión. Está plagado de imprecisiones geográficas, históricas y culturales, sin mencionar el hecho de que las situaciones en que se ven envueltos los personajes son muy poco creíbles. Es imposible no hacer comparaciones con la estupenda Romancing The Stone de Robert Zemeckis de 1984 y frente a la cual The Lost City se queda corta.
En su beneficio se pueden mencionar algunos detalles a favor del filme como los breves instantes en los que la química entre Bullock y Tatum resplandece, el cameo de Brad Pitt como el ultra eficiente militar quien no es más que una parodia del típico héroe de acción y por supuesto el hecho de haber sido totalmente filmada en República Dominicana resaltando paisajes de una belleza sobrecogedora, aunque a veces retocados digitalmente para incluir elementos inexistentes como un volcán activo.
Con todo y su pobre desempeño, The Lost City se constituye en un éxito inesperado en la taquilla, desplazando a The Batman del primer lugar en su semana de estreno y convirtiéndose en el segundo estreno más taquillero de Paramount en tiempos de pandemia sólo detrás de A Quiet Place II. Su presupuesto de ejecución fue de US$68 millones y a la fecha ha recaudado US$137 millones. Nada mal, tomando en cuenta las críticas ambivalentes. Todo esto denota la avidez del público por historias de aventura chapadas a la antigua con damiselas en peligro, romance, acción y un gran presupuesto.