Las tres principales distribuidoras cuentan con más de tres millones de clientes, y sólo en el año 2023 captaron 58,000 nuevos clientes. Desde el 2012 hasta el 2023, sólo 14,763 clientes han instalado paneles solares dentro del Programa de Medición Neta, los cuales apenas representan el 0.48 % de la totalidad de sus clientes. Por tanto, el nivel de penetración de uso de energía renovable distribuida es aún muy bajo.
Marvin Fernández, presidente de la Asociación para el Fomento de las Energías Renovables (ASOFER), expuso la importancia de la generación distribuida para garantizar una transición energética eficiente ya que, de lo contrario, “la transición energética que nosotros estamos buscando como país va a ser mucho más cara, mucho más lenta y menos justa”.
La generación distribuida renovable consiste en la producción de energía eléctrica generalmente sobre el techo de residencias, comercios e industrias ubicadas lo más próximo posible a las cargas, reduciendo la necesidad de inversión en infraestructura eléctrica, a la vez que mejora la calidad de la energía y las pérdidas técnicas.
Fernández sugiere promover más la descentralización en la generación de energía eléctrica, para masificar y democratizar la generación con fuentes renovables. Así como realizar un plan de instalación de paneles solares en comunidades remotas de bajos recursos a los fines de reducir los niveles de subsidios a la tarifa eléctrica y las pérdidas técnicas, lo cual afirma ayudará a mejorar las finanzas del sector eléctrico.
“No es cierto que las empresas distribuidoras pierden con este tipo de energías renovables, sino más bien ganan porque reducen el precio al que compran la energía en el mercado, alivia la sobrecarga de los transformadores de distribución y la congestión de la red”, aclaró.
La descentralización en la producción de energía mejora la sostenibilidad y eficiencia del sistema eléctrico, a la vez que tiene un impacto económico positivo en toda la sociedad, y mejora la seguridad energética.
Dijo que las energías renovables distribuidas aportan grandes beneficios económicos, sociales y ambientales al país, y subrayó el compromiso continuo de ASOFER en impulsar el crecimiento del sector desde diferentes ámbitos, especialmente el regulatorio.
Fernández, quien participó en el Seminario Permanente de la Realidad Dominicana (SEMPER), que realizó el Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC) en colaboración con el Ministerio de Energía y Minas (MEM), Fernández abordó el panorama actual y futuro de las energías renovables en el país.
“Sabemos que actualmente hay un déficit muy, muy grande de medidores en las empresas distribuidoras y hay mucha gente, más de 800,000 usuarios que están conectados a la red en conexión directa, sin medidores, pagando una tarifa fija”, mencionó Fernández.
A raíz de la cantidad de clientes que consumen energía eléctrica de la red de distribución y no pagan por el servicio, explicó que las distribuidoras experimentan pérdidas importantes en la administración de la energía.
Fernández destacó que el crecimiento de la demanda eléctrica del país es mucho mayor que el crecimiento de la capacidad instalada en generación distribuida. Según Fernández, este crecimiento demuestra la necesidad de reducir trabas y agilizar los procesos para fomentar el uso de energías limpias.
Enfatizó en la importancia de estudiar sobre el nivel de penetración de energías renovables admisible en los circuitos de distribución, paso que considera crucial para determinar cuánta energía renovable puede ser soportada por cada circuito.