El Consejo de Ministros de Haití aprobó este miércoles el nombramiento de la mayoría de los miembros que integrarán el Consejo Electoral Provisional (CEP) y fijó el mandato de este organismo, de cara a la celebración de comicios en el país.
En su reunión de este miércoles, el Consejo de Ministros dio luz verde a la ordenanza que establece su mandato, informó la Oficina del Primer Ministro, sin ofrecer más detalles al respecto.
Sin embargo, sí precisó los nombres de siete de las nueve personas que integrarán esa instancia y los movimientos e instituciones a los que pertenecen, en representación de diferentes sectores de la sociedad.
A falta de la designación de los miembros que formarán parte del CEP por parte de los Organismos de Defensa de los Derechos Humanos y las Asociaciones de Defensa de los Derechos de las Mujeres, este miércoles han quedado nombrados los representantes de Sindicatos, la Conferencia Episcopal, las Comunidades Vudú, los Cultos Reformados, el Consejo de la Universidad, las Asociaciones de Periodistas y la Asociación de Campesinos.
El objetivo es la celebración de elecciones en Haití, una de las principales tareas que tienen por delante el Consejo Presidencial de Transición y el Gobierno del primer ministro, Garry Conille.
Durante la reciente visita del secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, el presidente del Consejo Presidencial de Transición, Edgard Leblanc Fils, ya anunció que en unos días se comunicaría la formación del CEP, lo que finalmente se produjo este miércoles, y dijo que, una vez instalada, esa institución debería comenzar a trabajar para "asegurar a la población un proceso electoral a finales del año 2025″.
De esta forma, se podría proceder a la investidura de un presidente en 2026, en concreto en la fecha en la que tradicionalmente tienen lugar las tomas de posesión en Haití, el 7 de febrero.
Haití no tiene presidente desde que en julio de 2021 fue asesinado en su residencia el entonces jefe de Estado Jovenel Moïse por un grupo de mercenarios, en su mayoría colombianos.
Desde entonces, la crisis se ha agudizado aún más en el país más pobre de América, que vive bajo el terror de las bandas armadas, las cuales han llegado a controlar gran parte de la capital, Puerto Príncipe, y otras zonas del país.
Según la ONU, 2023 dejó en Haití al menos 8.000 víctimas de la violencia entre heridos y muertos, y solo en el primer semestre del año en curso las víctimas se elevaban a casi 3.900.
A fin de atajar la extrema violencia en Haití, en junio comenzó el despliegue de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad, liderada por Kenia y que cuenta con el visto bueno de Naciones Unidas.