La comunicadora dominicana Luz García, ya de regreso en el país, anunció que se hará representar por una profesional del derecho en la comparecencia ante la Justicia de EEUU del próximo 23 de agosto, citada por exceso de velocidad y consumo de alcohol en el condado Collier, aunque se declaró no culpable por ello.
«La acusada Luz Margarita Cecilia García Guzmán, a través de su abogado abajo firmante y de conformidad con la Regla 3.160 (3) del Código de Procedimiento Penal de Florida, se declara no culpable de los cargos establecidos en la información adjunta y renuncia a la lectura formal de la acusación. La acusada solicita un juicio por jurado», indica un documento presentado al juzgado.
En una declaración pública emitida tras la citación, la comunicadora reiteró que fue detenida en junio pasado cuando conducía "presumiblemente a exceso de velocidad" y tras ingerir "varias copas" de vino en una cena familiar, lo que hizo "alarmada" tras ser informada de que su hijo menor de edad había sufrido un percance en una ciudad distante cuatro horas y que se requería su presencia para una intervención quirúrgica.
El entramado burocrático judicial es el de rigor para estos casos en EEUU, pero "no me arrepiento de haber actuado como una madre que pensó en lo peor de cara a la salud de mi hijo", dice Luz García en esa declaración pública que a continuación se reproduce de manera íntegra, la que no ofrece novedades respecto a lo ya declarado por la profesional con anterioridad.
Quiero compartir con todos los medios de comunicación, la sociedad, amigos, relacionados y seguidores, las siguientes informaciones de cara al proceso que se conocerá en una audiencia preliminar que tendrá lugar el 23 de agosto del presente año, en una corte de Collier County, Florida, respecto a mi detención.
Este es un proceso de rigor para estos casos, es decir, que debo agotar el protocolo judicial establecido de la mano de mis abogados, por lo que no estoy obligada a asistir a la audiencia, como se ha afirmado en algunos medios de comunicación, de la misma manera el declararme no culpable es también lo normal y una recomendación de mi abogada.
Desde el primer momento en el que se dieron los hechos, he asumido con entereza y total transparencia todo lo acontecido, compartí un video donde señalé los detalles de lugar y lo que provocó que reaccionara alarmada, por la llamada para informarme del accidente de Miguel Ángel y su traslado a un hospital para ser intervenido quirúrgicamente.
A lo largo de toda mi carrera, me he esforzado por ser una ciudadana correcta y respetuosa de la ley, tanto en mi hermosa patria, República Dominicana, como en cualquier otro país que visite, por lo que asumo con total responsabilidad las consecuencias generadas por conducir presumiblemente a exceso de velocidad, ante la desesperación de llegar a dar el consentimiento para la intervención quirúrgica que debían practicarle a Miguel Ángel.
De la misma manera he asumido los aprendizajes de lugar, en cuanto a todo lo que pude hacer diferente para evitar un escenario como este, aunque sé que pudo ser diferente si no hubiese decidido conducir, no menos cierto es, que no me arrepiento de haber actuado como una madre que pensó en lo peor de cara a la salud de mi hijo.
Reiterar por esta vía que di negativo al uso de sustancias controladas, según el protocolo establecido en USA 🇺🇸 para estos casos, que establece la realización de todas las pruebas a las que di negativo.
El proceso que se me sigue es algo normal para aquellos ciudadanos que exceden el límite de velocidad y el límite de alcohol establecido en la Florida.
Nunca imaginé que una cena familiar aquel inolvidable día 11 de junio, después de compartir varias copas de vino, sin planes de salir y muchos menos conducir, tendría que manejar cerca de 4 horas para llegar a Tampa, ante el accidente de Miguel Ángel en su campamento de verano.
En la vida nunca elegimos las pruebas que nos toca vivir, mucho menos podemos aspirar a planificar los accidentes, pero sí a aprender con humildad de situaciones como estas.
Solo me toca ser agradecida, primero de Dios, por el restablecimiento de la salud de Miguel Angel, y luego con tanta gente querida, mi familia, amigos y de manera especial a cada uno de los seguidores que me han dado su apoyo y palmadas de aliento, para que pueda superar y cerrar este proceso.
Sin minimizar en lo más mínimo la situación y la responsabilidad con la que me corresponde responder ante el tribunal, quiero apelar a la sensatez y solidaridad de siempre de toda nuestra gente, para que despejen cualquier duda al respecto y sepan que todo lo expresado en este comunicado es toda la verdad y nada más que la verdad.
Este próximo 23 de agosto estaré representada en la audiencia, por mi abogada, Lisa Heffington, ya que no estoy obligada a comparecer personalmente, este es un proceso normal en este tipo de casos.
Me encuentro en Santo Domingo, retomando todas mis labores y compromisos, sabiendo que cuento con todos ustedes, para que todo esto quede en los aprendizajes de lugar, cumplir con las sanciones que decida el tribunal y sabiéndome feliz de que Miguel Ángel se está recuperando satisfactoriamente.
Gracias del alma a todos y todas, con muchas fuerzas y optimismo me preparo para seguir recorriendo este camino de Luz y buenas vibras con todo mi público.
Luz García