Luz María inició a trabajar en el sector formal a sus 43 años, luego de ser estilista en un barrio populoso de Santo Domingo. Ahora tiene 53 años y lleva apenas 120 de las 360 cotizaciones establecidas para optar por la pensión de vejez. Para llegar a las cotizaciones mínimas, la contable en un bufete de abogados tendría que ejercer 20 años más o hasta cumplir 73 años.
Para hablar de las administradoras de fondos de pensiones (AFP) hay que remontarse al 2001, con la promulgación de la Ley 87-01, que creó el Sistema Dominicano de Seguridad Social, donde las empresas comienzan a administrar los ahorros individuales y otorgar a sus afiliados las prestaciones que establece la legislación.
Las AFP registraron en ese entonces 986,538 afiliados, el cual marcó el antes y después del sistema de pensiones en República Dominicana, según la Superintendencia de Fondos de Pensiones (Sipen).
¿Qué ha pasado en las últimas dos décadas en el sistema de pensiones dominicano? Desde 2003 hasta 2023, las AFP presentaron un crecimiento de 255.4 % en cotizantes y un salario promedio de RD$ 33,444, RD$ 26,037 más que los RD$ 7,407 reportados en su inicio.
Además, la Sipen registró siete AFP (Popular, Siembra, Reservas, JMMB-BDI, Crecer, Atlántico, Romana) de capitalización individual, al cierre de abril 2024.
Entre diciembre del 2003 e igual mes del 2023, el patrimonio de estas empresas tuvo un crecimiento de 17,613.5 %, al pasar de RD$ 6,849.8 millones a RD$ 1 billón 213,344 millones reflejando una diferencia absoluta de RD$ 1 billón 206,494.1 millones.
La presidente ejecutiva de la Asociación Dominicana de Administradoras de Fondos de Pensiones (ADAFP), Kirsis Jáquez, indicó que las AFP han tenido buenos resultados a casi 21 años de su inicio.
“Este sistema ha contribuido con la estabilidad y el crecimiento económico del país, con el desarrollo y profundización del mercado de valores y ha generado liquidez al sector financiero dominicano”, explicó la funcionaria a ACENTO.
Tanto la Sipen como la ADAFP señalaron que las pensiones han crecido sosteniblemente, cumpliendo con sus compromisos, manteniendo la confianza de la población económicamente activa y diversificando su patrimonio para generar mayor rentabilidad.
Al tomar como referencia el período diciembre 2019 y diciembre 2023 se observa un aumento de un 71.4 % en el patrimonio. En 2019 se ubicó en RD$ 707,666.4 millones, mientras que en 2019 ascendió a RD$ 1,213.3 millones.
De 2019 (RD$ 707,666.4 millones) a 2020 (RD$ 820,942.2 millones) el patrimonio aumentó en un 16 % (RD$ 113,275.8 millones). Del 2021 (RD$ 960,567.1 millones) al 2022 (RD$ 1,062.3 millones) varió 10.5 %, o RD$ 101,735.1 millones más. Asimismo, en 2023, el valor se situó en RD$ 1,213.3 millones.
Pese al crecimiento del sistema de pensiones, aún persisten los desafíos
Kirsis Jáquez afirmó que aún se deben abordar los retos que enfrenta el sistema dominicano de pensiones, acción que aumentará la cobertura. Citó el desempleo, la informalidad laboral, la evasión y elusión a la seguridad social.
“Las personas desempleadas y las que trabajan en la informalidad no cotizan y no están acumulando un patrimonio para su retiro de la vida laboral”, afirmó.
Las cifras del Banco Central (BCRD) y la Sipen lo demuestran: a diciembre de 2023, sólo el 39.4 % de los afiliados a las AFP cotizó en la Tesorería de la Seguridad Social (TSS). Pero, además, en el tercer trimestre de 2023, la fuerza laboral informal se situó en 56.7 %, quienes ejercen en el mercado no regulado y viven del día a día.
“La informalidad es un reto importante para los sistemas de pensiones, porque incide en la baja cantidad de cotizaciones y excluye a sectores vulnerables de los beneficios fundamentales como las pensiones por vejez, discapacidad y sobrevivencia”, comentó la Sipen.
Pero, además, Jáquez aclaró que algunos empleadores no incluyen o reportan salarios más bajos, lo que incide en el fondo acumulado desproporcionado a los ingresos reales. Esta acción se conoce como elusión a la seguridad social.
“Los beneficios del sistema de pensiones están determinados por el salario por el cual se cotiza; si el salario cotizable es menor al que realmente reciben, sus beneficios también serán inferiores”, aseveró Jáquez.
De acuerdo con la legislación, el trabajador aporta un 2.87 % de su salario mensual, mientras que el empleador un 7.10 %.
Por ejemplo, Abigail Marte recibe RD$ 25,000 en su empresa, de este monto se le descuenta RD$ 717.5 por concepto de pensiones, es decir, 2.87 %. La cantidad aumentará dependiendo del salario del cotizante, quienes devengan un salario de RD$ 45,000, cotizarán RD$ 1,291.5 para RD$ 15,498 al término de 12 meses, (sin el aporte del 7.10 %).
Si se suman ambos aportes, cada mes el cotizante aportaría 9.97 % a su futura pensión, que equivale a RD$ 2,492 (con retribución salarial de RD$ 25,000) o RD$ 4,486 (por ingresos de RD$ 45,000), según los cálculos realizados por ACENTO.
Los cotizantes son menos que los afiliados
Conforme las estadísticas del Sipen, para abril del 2024, se contabilizan 5,123,198 afiliados, pero solo 2,128,643 cotizantes, es decir, 41.5 %, existiendo una brecha entre los que aportan cada mes para su retiro.
Los afiliados son obligatorios y permanecen durante la jornada laboral activa de una persona hasta que se pensiona. Sin embargo, los cotizantes hacen referencia al pago de las contribuciones establecidas por la ley y genera un ahorro acumulativo e individual.
Con la Ley de Pensiones, el país registró ocho empresas que consolidaron 986,538 afiliados, de los cuales 284,709 pertenecían al Popular, 136,648 a Siembra y 120,745 a Crecer, siendo las tres de mayor aporte (54.9 %). Sin embargo, se fueron reduciendo conforme los años.
Camino, Caribalico y León fueron absorbidos por AFP Siembra entre 2005 y 2007, aumentando sus afiliados a 301,806 luego de la adquisición. Mientras, Porvenir fue absorbida por Scotia Crecer en 2004, que duplicó sus afiliados en un año, al pasar de 120,745 a 312,620. En marzo del 2009 entró al mercado Inabima con 61,371 afiliados, así las AFP suma 2,029,444 en total.
Un año después, la Sipen registró el ingreso de AFP Atlántico, con 845 afiliados, por lo que los afiliados ascendieron a 3,397,483. En octubre del 2007, la Sipen reportó 211 nuevos dominicanos en JMMB-BDI, que en total ascienden a 3,657,911.
A abril del 2024, las estadísticas muestran que el Popular (1,543,739), Crecer (1,454,401) y Siembra (1,043,166) son las tres empresas de pensiones que mayor afiliación registran y representan el 78.8 % del total de 5,123,198.
Un ahorro individual que debe ser con conciencia
Al cierre del 2023, el Banco Central (BCRD) registró que 4,835,318 dominicanos ocupados. Sin embargo, 595,883 adultos conforman la edad de 60 y más, o sea, el 12.3 %. Entre octubre-diciembre del 2022 y 2023 hubo un crecimiento de 6.8%, al pasar de 557,862 a 595,883, en términos absolutos es de 38,021, lo que es señal de que aún en su edad de retiro carecen de las cotizaciones suficientes para una pensión.
Rosa Baluarte es secretaria y recibe cada mes RD$ 35,000 por concepto de pensión, pero el costo de la canasta básica asciende a RD$ 45,057, es decir, la profesional registra un déficit de RD$ 10,057.
Refirió que recibe hasta US$ 200 o RD$ 11,762 (al cambio de RD$ 28.81 por US$ 1) de su hija menor que vive en Cincinnati, Estados Unidos, como remesas para sobrellevar los gastos de medicamentos de la presión arterial y la diabetes y el pago de servicios básicos del hogar.
El sistema de pensiones es de ingreso obligatorio, así lo establece la legislación. No obstante, algunos profesionales se enfrentan al encarecimiento de la canasta básica, el salario mínimo insuficiente y las bajas cotizaciones.
“El principal reto es el aumento en la esperanza de vida, resultante de los avances en la ciencia, la medicina y la tecnología. Este reto es uno sistémico y no depende únicamente de los esfuerzos de la entidad, pero sí requiere de un mayor flujo financiero para cubrir las pensiones de los afiliados, lo que apunta a la necesidad de un mayor nivel de ahorro durante la vida productiva”, señaló la Superintendencia de Pensiones (Sipen).
El organismo regulatorio reconoció que uno de los desafíos es aumentar la conciencia de la ciudadanía sobre la importancia del ahorro individual para la vejez. “Las personas no tienden a priorizar ni a planificar cómo financiarse durante las etapas no productivas y en la que además somos más vulnerables a enfermedades”, sostuvieron.
Exhortaron a que, además de los aportes obligatorios al sistema de pensiones, se debe promover y educar sobre los beneficios que recibirán quienes decidan ahorrar de manera voluntaria para su retiro.
La pareja Jiménez-Espaillat, de 32 años y sin hijos, es un ejemplo del pensamiento de quienes “no cuentan” con la pensión de RD$ 35,000 en promedio (abril del 2024) para vivir al momento de su retiro.
“Estamos comprando viviendas para alquilar y tener ingresos extras de hasta RD$ 50,000 mensuales, pero también estamos pensando en abrir un fondo de inversión para generar intereses mientras aportamos al menos un 10 % de nuestros salarios”, señalaron.
Las cotizaciones recaudadas por los trabajadores se acumulan en un fondo común y son utilizadas para financiar las pensiones otorgadas a los jubilados.
El sistema de capitalización individual se deposita en una cuenta a nombre de cada afiliado, las cuales generan rentabilidad a través de las inversiones.
Si bien el patrimonio de las AFP ascendió a RD$ 1 billón 274,198 millones 124,848 pesos a abril del 2024, RD$ 1 billón 179,147 millones con 186 pesos se registran por las cuentas de capitalización individual.
Además, la Ley establece un fondo de solidaridad social que acumula a abril de este año RD$ 73,962 millones, seguido de fondos de reparto individualizado con RD$ 48,664.5 millones, fondos complementarios RD$ 90.5 millones e Inabima unos RD$ 140,301.3 millones.