Los agentes de la DNCD, de la seguridad militar del puerto, inspectores de Aduanas y miembros del Ministerio Público realizaban una verificación rutinaria, cuando detectaron inconsistencias en un contenedor para exportación, que tenía como destino final España, iniciando de inmediato el protocolo de actuación.
La operación, que también contó con el apoyo de unidades caninas, procedió a abrir en un contenedor cargado de cerámicas, (coralina natural), donde se encontraron varias paletas o tarimas, en cuyo interior se confiscaron los 117 paquetes de una sustancia que se presume es cocaína.
"Esta no es la primera vez que las autoridades descubren esta modalidad de los narcotraficantes que utilizan las paletas de madera, que sirven de tarima a las cargas, para introducir sustancias narcóticas en contenedores y tratar de burlar los controles de las autoridades", afirmó la DNCD en una nota.
El Ministerio Público y la DNCD han iniciado una investigación en relación a la frustrada operación de narcotráfico internacional y esperan conforme avance el proceso ofrecer mayores detalles.
Las autoridades han continuado dando golpes contundentes a las redes criminales, que intentan utilizar los aeropuertos, puertos, costas y fronteras del país, para traficar con sustancias narcóticas, en su mayoría cocaína, agregó el organismo.
Los 117 paquetes de la sustancia fueron enviados bajo cadena de custodia al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) para determinar el tipo y peso exacto del alijo