La Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (PEPCA) no ha tomado acciones legales en contra de varios generales y coroneles que operaron una supuesta mafia en la compra de combustibles para la Policía Nacional que afectó fondos al Estado con RD$ 32 379 621.
Aunque la Investigación Especial de la Cámara de Cuentas de la República (CCRD) detectó numerosas irregularidades con indicios graves de corrupción en los contratos de compras de carburantes, los funcionarios responsables siguen sin enfrentar la justicia.
La PEPCA solicitó al órgano de control externo una investigación especial a los métodos de adjudicación, ejecución, despacho, fiscalización y libramientos de pagos por concepto de suministro de combustibles a la Policía Nacional, donde los hallazgos evidencian incumplimientos de contratos y apropiación de recursos.
La institución policial, durante la gestión del mayor general Nelson Ramón Peguero Paredes (2015- 2017), adjudicó varios contratos irregulares a las compañías Full América INC. Dominicana, SRL, propietaria del Alexis Medina, hermano del entonces presidente Danilo Medina.
Los generales y coroneles que administraron los presupuestos de la Policía durante el periodo auditado ordenaron y pagaron compras de diferentes tipos de gasolina y gasoil que nunca recibieron.
Los hallazgos podrían comprometer legalmente al exjefe de la institución mayor general Nelson Ramón Peguero Paredes y agregar cargos a Alexis Medina, principal imputado en la operación Antipulpo, dirigida por la Procuraduría General de la República.
En la experticia, que fue solicitada a la CCRD por el procurador adjunto Wilson Camacho, titular de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa, se detectaron irregularidades en la compra de 583 839 galones de gasolina y 653 000 de gasoil para las estaciones de la Policía Nacional.
En 2015, la Policía Nacional pagó a la empresa de Alexis Medina la suma de RD$ 15 564 900, pero los investigadores de la CCRD no pudieron localizar los expedientes de pagos ni de entrega del insumo por parte del proveedor.
En la fiscalización, los auditores detectaron que las órdenes de compras carecen de fecha de elaboración, cantidad de galones adquiridos y precios; ni siquiera se identifican las estaciones donde fueron depositados.
Algo que llamó la atención de los investigadores fue que la policía compró en 2015 gasolina regular, premium, gasoil regular y gasoil óptimo pese a que las estaciones solo tenían dos tanques para dos tipos de carburante.
La entidad (Policía Nacional) pagó por concepto de gasolina Premium RD$ 20 669 400 por la cantidad de 180 000 galones y otros RD$ 10 200 400 por el suministro de 67 000 galones gasoil óptimo.