El Arzobispado de Barcelona no conoce que su titular, el cardenal arzobispo Juan José Omella, invitara al obispo de origen catalán Víctor Masalles a trabajar con él en la capital catalana, según publicó este miércoles el Diario católico Catalunya Religión.
El controvertido Masalles, de 62 años, anunció el martes su renuncia como obispo de Baní “a raíz de una invitación" que dijo recibió del arzobispo Omella para "colaborar en su diócesis".
"Decidí aceptar el desafío, junto a los retos que representa. Me siento muy agradecido por la acogida que me ofrece el Sr. Cardenal”, añadió y sostuvo que tal traslado cuenta con las bendiciones formales y administrativas del papa Francisco.
Pero tras ello, Catalunya Religión sostuvo que no hay tal nombramiento del Vaticano y que Masalles en Barcelona "parece que ni está, ni se le espera".
La siguiente la versión íntegra de Catalunya Religión:
Víctor Masalles, obispo de Baní (República Dominicana) ha anunciado este martes a través de las redes sociales que su renuncia episcopal responde a una invitación del cardenal Juan José Omella para venir a colaborar a Barcelona. El obispo asegura que es una decisión acordada con el papa Francisco y con el arzobispo de Barcelona, pero lo cierto es que el arzobispado de Barcelona asegura que no sabe nada de este movimiento.
El único vínculo que tiene Masalles con Barcelona es que nació en esta ciudad en 1961 de padres catalanes, pero con cuatro años la familia emigró a la República Dominicana. Realizó toda la formación y carrera eclesiástica en este país y no consta ninguna relación pastoral con las diócesis catalanas durante todos estos años.
Masalles
Esta supuesta invitación del cardenal Omella, de la que nadie da fe, se enmarca en una renuncia que parece más una destitución.
A sus 62 años, todavía le quedaban años como obispo. Todos los medios de comunicación latinoamericanos le encuadran en el episcopado contrario al papa Francisco y hombre polémico por sus declaraciones públicas.
Desde el arzobispado de Barcelona no quieren entrar en polémicas y aseguraron a Catalunya Religió que a fecha de hoy esta petición no les consta.
El obispo Masalles hizo pública esta versión cuando la Santa Sede anunció el fin de su mandato.
Es poco creíble que un obispo renuncie a su diócesis para ir a ayudar en otro obispado. Tampoco hay ningún nombramiento del Vaticano que le lleve a Barcelona. Parece que ni está, ni se le espera.