Una alta presencia de Salmonella entérica y de Escherichia coli fueron detectadas en alimentos como ajíes, lechoza, carnes de aves, de cerdo y de vaca, entre otros, procedentes de República Dominicanainformó Luis Maroto, profesor del Área de Ciencias Básicas y Ambientales del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (Intec).
Al dictar la conferencia central del Seminario Permanente de la Realidad Dominicana (Semper) organizado por el Intec, con el tema “Situación de la Inocuidad Alimentaria en República Dominicana: Perspectiva Intec”, Maroto precisó que en una muestra de alimentos procedentes de República Dominicana, en que se incluyó las heces de cerdos, vacas y aves, fue posible identificar cinco genomas de bacterias: fusarium musae, Enterobacter Cloacae, Enterobacter roggenkampii, E. Coli y Salmonella entérica, entre las cuales el 65 % correspondió a Salmonella y 33 % a E. Coli, cuyos datos han sido depositados en la Base de Datos genómicos del Centro Nacional para la Información Biotecnológica de Estados Unidos (NCBI, por sus siglas en inglés).
A juicio del investigador, en momentos en que el país da pasos importantes en el proceso de exportación de alimentos cárnicos a Estados Unidos, es fundamental mantener las buenas prácticas agrícolas y de manufactura para conservar los estándares de calidad y de control microbiológico, de modo que se asegure la inocuidad de los alimentos, tanto de los exportados como los de consumo nacional.
En ese sentido, abogó por la creación de la Red Dominicana de Investigación en Inocuidad Alimentaria (Rediia) tras sostener que urge profundizar en investigaciones relacionadas con la temática, desarrolladas por investigadores locales. Dijo que la Rediia estaría integrada por universidades, laboratorios, empresas del sector de alimentos y entidades gubernamentales.
Al ofrecer las palabras de apertura, el rector del Intec, Julio Sánchez Maríñez, señaló que, en el marco de su cincuenta aniversario, la universidad se ha propuesto retomar el Seminario Permanente de la Realidad Dominicana (Semper Intec), iniciado hace más de tres décadas y media, para hacer contribuciones a la sociedad dominicana.
Explicó que el propósito del Semper es crear un espacio de debate e intercambio para la realización de un análisis crítico (constructivo), un espacio abierto de discusión y cooperación, de búsqueda de consenso en el diagnóstico y propuestas de solución a temas y problemas de interés nacional.
Factores que afectan la inocuidad
Durante su ponencia, Maroto señaló como factores que afectan la inocuidad de los alimentos las prácticas agrícolas inadecuadas, la falta de higiene en la fase de la cadena alimentaria, la creciente comercialización de alimentos, la ausencia de controles preventivos en las operaciones de elaboración y preparación de alimentos y la utilización inadecuada de productos químicos, la contaminación de materias primas o el almacenamiento inadecuado, entre otros.
“Intec se ha propuesto contribuir al desarrollo de investigaciones en el área de Inocuidad Alimentaria, realizando estudios de alta tecnología, destinando y creando capacidades investigativas que necesitan de un impulso considerable, sobre todo desde el punto de vista de estructura, y al mismo tiempo incremento de la capacitación de los recursos humanos”, manifestó Maroto.
Citó acciones que Intec ha realizado estrechamente relacionadas a la inocuidad alimentaria entre ellas: investigaciones sobre la presencia de patógenos en los ríos Ozama, Isabelita, Yaque del Norte y Yaque del Sur. “En todos los casos los resultados han sido de alto interés, permitiendo aislar e identificar en forma mayoritaria enterobacterias que portan además elementos genéticos que les confieren resistencia a los antibióticos”.
Dijo que la academia realiza análisis sobre los microorganismos más frecuentes en vegetales que son utilizados para consumo fresco, o sea sin proceso de cocción. De igual forma, se ha detectado una gran variedad de microorganismos con elevada potencialidad patogénica y portadores de genes de resistencia.
Tras la intervención de Maroto se efectuó un panel que fue moderado por el profesor Edian Franco, en el que participaron el economista Braulio Rodríguez Villavizar; Pedro de Padua, Representante de la Dirección General de Medicamentos, Alimentos y Productos Sanitarios, Carlos Ariel Castillo Vicioso, Especialista del Departamento de Inocuidad Alimentaria del Ministerio de Agricultura (DIA) y María de Lourdes Núñez, coordinadora de la carrera Ingeniería en Logística y Transporte de Intec.
De Padua puntualizó que el gasto de salud pública por Enfermedades de Transmisión Alimentaria (ETA) es un valor muy elevado. De su lado, Rodríguez Villavizar llamó al empresariado a no considerar como gasto la inversión que realizan para alcanzar los estándares de inocuidad que se demandan.
Asimismo, Castillo Vicioso dijo que entre los retos del país están establecer un sistema nacional de inocuidad agroalimentaria, crear la ley de inocuidad agroalimentaria y que las universidades incorporen cátedras de inocuidad y seguridad alimentaria. En tanto, Nuñez dijo que el país creó una normativa sobre cadena de frío y que actualmente se trabajan seis protocolos para su regulación.