El cura párroco de la iglesia Nuestra Señora de Las Mercedes y Santa Ana, de Nizao, Baní, consideró que la ambición, la envidia y los vicios son responsables de la violencia y la delincuencia.
El sacerdote Willy Rosario dijo no explicarse cómo un hombre mata a otro porque perdió una mano de dominó o porque rozó su vehículo mientras conducía y afirmó que esas actitudes violentas evidencian la ausencia de Dios en los corazones de la gente.
“Es necesario que nos detengamos a meditar sobre la necesidad de practicar la tolerancia, el respeto a la vida de los demás”, expresó el religioso al oficial una misa conmemorativa del 14 aniversario del Centro Internacional de Cirugía Plástica Avanzada (CIPLA).
Durante el acto religioso, al que asistieron ejecutivos de CIPLA, médicos y personal administrativo, el sacerdote expresó que también existe una gran apatía por el trabajo de parte de jóvenes que solo aspiran al dinero fácil para adquirir lujos que no llenan sus vacíos existenciales.
“Solo Dios es capaz de llenar la vida de la genta. Ni el dinero, ni la fama, ni los vicios ocupan el lugar de Dios en la vida de los hombres. Dios basta para llenar la vida de la gente”, expresó el religioso, durante la misa celebrada en la sede del centro de salud, en la avenida Pedro Henríquez Ureña, en la capital.
Héctor Cabral, director de la clínica, dijo sentirse orgulloso de que siguen trabajando con él la mayoría de los empleados que le acompañaron en la apertura de la institución.
“Es un orgullo para nosotros que estén aquí los empleados que iniciaron en el centro, aportando un grano de arena para que, con nuestro trabajo, contribuyamos a tener un mejor país”, expresó Cabral.
Su hermano, Héctor Luis Cabral, dijo estar satisfecho del esfuerzo del personal que labora en el centro de salud para que su servicio sea eficiente.