La Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y el Ministerio de Energía y Minas (MEM) describieron las principales barreras relativas a la equidad de género que se debe abordar en el diseño de políticas públicas y en los procesos de toma de decisiones para lograr una transición energética justa e inclusiva.

El proyecto de la USAID para la Reforma del Sector Energético promueve la autosuficiencia de trece países del Caribe al reforzar el desempeño de sus sistemas de energía.

Mediante el fortalecimiento del sector energético en la región, el proyecto ayuda a las naciones caribeñas a incrementar su independencia energética, desarrollar economías productivas y diversas y fortalecer su capacidad para enfrentar cambios en el clima y en el mercado.

La Reforma del Sector Energético se enmarca dentro de la Asociación entre Estados Unidos y el Caribe para abordar la Crisis Climática 2030 (PACC 2030, por sus siglas en inglés), impulsando los objetivos estratégicos de seguridad energética y adaptación climática.

Con el encuentro denominado “Transición Energética Justa e Inclusiva”, los gobiernos de ambos países resaltaron la importancia de utilizar un abordaje de inclusividad, equidad de género y justicia climática en el proceso de transición hacia fuentes de energías renovables y reducción de emisiones de gases de efecto invernadero que atraviesa el país.

Entre los temas abordados en el encuentro estuvieron la importancia y utilidad de la gestión de datos estadísticos para el diseño de políticas públicas inclusivas; la integración del uso de indicadores de equidad de género en la elaboración y la evaluación de políticas energéticas y el empoderamiento de las mujeres en el sector de las energías renovables.

En sus palabras de apertura, el ministro de Energía y Minas, Antonio Almonte, abogó por la participación de la mujer en las diversas áreas del sector energético.

Además, resaltó la importancia de que el país continúe avanzando en el proceso de transición energética para reducir la dependencia de combustibles como el gas natural, el petróleo y el carbón mineral, que no se producen en el país.

De su lado, la especialista de Proyectos Energéticos de la USAID, Katerin Ramírez, agregó que “asegurar que las mujeres tengan participación en los procesos de toma de decisiones que conllevan la transición energética y la descarbonización es clave para asegurar que las políticas públicas reflejen las perspectivas y prioridades de todos los dominicanos”.

El evento incluyó la conferencia “Data y diseño de políticas públicas inclusivas”, a cargo de Perla Rosario, directora de Estadísticas Económicas de la Oficina Nacional de Estadística (ONE).

En su intervención, la economista expuso sobre la naturaleza de las políticas públicas inclusivas y la importancia de los datos para diseñar intervenciones específicas que beneficien a grupos desfavorecidos.

La actividad contó, además, con un taller sobre el abordaje de género en la estrategia de descarbonización, a cargo del Consejo Nacional para Cambio Climático y Mecanismo de Desarrollo Limpio (CNCCMDL), y un taller sobre el empoderamiento femenino en el sector de energías renovables, impartido por Mujeres en Energía y The Nature Power Foundation.