En el Día Nacional de la Juventud Profamilia deploró las cifras alarmantes que frenan el desarrollo social de la gente joven, y que le dan al país un triste protagonismo en temas como el embarazo en adolescentes, uniones tempranas, dificultad de acceso a trabajo y educación entre otras situaciones no menos preocupantes.
Magaly Caram, directora ejecutiva de la institución, recordó que República Dominicana sigue estando entre los primeros países de la región con el mayor índice de embarazos en adolescentes, así como de uniones tempranas o matrimonios infantiles, a la vez que lamentó la ausencia de una educación integral en sexualidad en el sistema escolar que ofrezca información apropiada, oportuna y científica sobre su propia sexualidad, así como efectivos mecanismos de protección y denuncia ante el abuso sexual.
“El país se encuentra entre los primeros tres países de la región con el más alto índice de embarazos en adolescentes, mientras que ocupa el primer lugar en América Latina en matrimonio infantil, eso presenta un escenario alarmante en el aseguramiento y ejercicio de derechos sexuales y reproductivos de la juventud”, señaló.
Consideró que para un desarrollo pleno, la juventud demanda mayores garantías para el ejercicio de los derechos sociales, civiles, económicos y políticos, así como de sus derechos sexuales y reproductivos (DSDR) y la equidad de género, a partir del fortalecimiento de la participación en los procesos de formulación, ejecución y monitoreo de políticas públicas, programas y proyectos desarrollados en las diferentes instancias, desde la gestión municipal hasta el Gobierno central.
Consideró propicia la fecha para llamar la atención hacia la situación de las personas jóvenes en el país, “es momento de poner los ojos en esa población que ni estudia ni trabaja y que a mayor edad más se reducen sus oportunidades de tener una carrera que les permita ser competitivos en el ambiente laboral, alcanzar una vida plena al amparo de políticas públicas establecidas para este fin”, indicó.