Agentes contramotines de la Policía Nacional interrumpieron alrededor del mediodía de este domingo una marcha de dirigentes y militantes del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) que se dirigía desde el principal locar de esa organización hacia el Palacio de Justicia de Ciudad Nueva, donde guaran prisión exfuncionarios y dirigentes peledeístas sometidos a la justicia por corrupción en el caso operación Calamar.

 

Agentes del llamado equipo "Swat" lanzaron bombas lacrimógenas contra los peledeístas, los cuales se quejaron de la represión y acusaron al presidente Luis Abinader de haberse convertido en un "dictador".

Alegando que se trata de persecución política, y no de lucha contra la corrupción, los peledeístas defienden a los imputados en el caso Calamar, que según las autoridades de la Procuraduría General de la República envuelve una suma de alrededor de 20 mil millones de pesos.

Luego de intentar apostarse en los alrededores del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva, los peledeístas fueron obligados a retroceder y se concentraron en la zona de la Casa Nacional de PLD, situada en la avenida Independencia.

Denunciaron que por lo menos dos peledeístas fueron apresados, y que algunos resultaron lesionados por las bombas lacrimógenas.

Asimismo, el vehículo de la dirigente de PLD en Bonao, Fiordaliza Pichardo, antigua militante del Partido Reformista, resultó con el cristal trasero roto. Pichardo culpó a la policía por el hecho, y consideró que se trató de una acción dirigida contra su persona.