El obispo de la diócesis de San Francisco de Macorís, consideró positivo el trabajo anticorrupción, que se ha llevado a cabo, y felicitó al poder ejecutivo y al judicial, por el gran empeño puesto en eliminar este flagelo que lacera todos los demás valores.
Monseñor Ramón Alfredo de la Cruz Baldera, entiende que el amor al dinero está destruyendo la vida de miles de jóvenes dominicanos.
“A otros les sucede como al príncipe de Tiro, que nos narra el profeta Ezequiel, que al poseer riquezas se creyó que su corazón era más grande que el de Dios, se volvió altanero y paseaba su riqueza creyéndose más que Dios”, refirió.
El Obispo de la diócesis, quien es además el Gran Canciller de la Universidad Católica Nordestana (UCNE), emitió sus consideraciones al pronunciar la homilía en la catedral Santa Ana, con motivo de la celebración del Día de la Restauración.
A la actividad religiosa asistieron autoridades civiles y militares de la provincia Duarte, así como funcionarios de la UCNE.
Monseñor De la Cruz Baldera, sostiene que poseer riquezas no es malo, pero si ésta es lograda por medios ilícitos, corroe todo lo que toca.
“Los hombres y mujeres de buena voluntad, no debemos claudicar en la búsqueda de una sociedad mejor y les animo a que continuemos trabajando por nuestra nación, ya que los que buscan el mal no superaran nunca a los que buscamos el bien”, significó.
En referencia a la fecha conmemorativa, el Obispo de la Diócesis de San Francisco de Macorís, consideró que es un día especial para reflexionar sobre nuestra nación dominicana y dar gracias a Dios, por los héroes restauradores que en un gesto de heroísmo fueron capaces de entregar sus vidas por su presente, pero pensando mucho más en el futuro de la nación.
Asimismo, dar gracias a Dios, porque vivimos en un país, donde por lo menos tenemos algunos espacios donde podemos pensar y actuar libremente.
“Condiciono lo anteriormente dicho, decidir de manera libre, porque bien sabemos que en el espacio global en que se mueven las naciones, hay poderes políticos, económicos, religiosos y culturales, que condicionan la libertad y el derecho de los ciudadanos”, refirió.
Agregó que al igual que en el año 1865, existen las manos largas de los imperios que aún inspirados por una geopolítica global se están convirtiendo en explotadores de las naciones más débiles del mundo y somos testigos de una nueva geocolonización, disfrazada de ideología de género, feminismo, secularismo y otras tantas corrientes opuestas al desarrollo naturales del ser humano.
Monseñor Ramón Alfredo de la Cruz Baldera, señaló que hablar de la Restauración, es hablar de tareas pendientes, como la aprobación de un nuevo código penal, que respete los valores que dieron origen a nuestra nacionalidad y respetar las leyes, en especial el cumplimiento de las normas de tránsito, ya que por sus violaciones mueren miles de personas en las carreteras, colocando a la Republica Dominicana, de acuerdo a estadísticas recientes, en el número uno en el mundo en accidentes de tránsito.
En tal sentido, formuló un llamado a las autoridades responsables de regular el tránsito vehicular a poner lo mejor de su parte en hacer cumplir la ley.
También estableció que deben ser restaurados los valores patrios, el amor a la patria.