El Gobierno de Nicaragua rompió este viernes relaciones diplomáticas con Israel, en solidaridad con Palestina y "al cumplirse un año del brutal genocidio que continúa cometiendo el Gobierno fascista y criminal de guerra de Israel en contra del pueblo palestino" y que por tercer día consecutivo dispara a matar contra personal de la ONU.
"En solidaridad permanente con el pueblo y Gobierno de Palestina, con los pueblos que sufren el martirio, la destrucción y la barbarie y en estricto apego al derecho internacional y a las convenciones que rigen las relaciones civilizadas entre Estados y Gobiernos del mundo, el Gobierno de la República de Nicaragua rompe toda relación diplomática con el Gobierno fascista de Israel", indicó el Ejecutivo nicaragüense en un comunicado.
Poco antes, la Asamblea Nacional de Nicaragua (Parlamento) aprobó este mismo viernes por unanimidad su "condena el continuo genocidio, la crueldad, el odio extremo y el exterminio que ejecuta el Gobierno de Israel".
El Parlamento de Nicaragua pidió este viernes a Ortega que rompa relaciones con el Gobierno de Israel, al que declararon "enemigo de la humanidad".
España, Francia e Italia expresan su indignación por ataques israelíes a Finul
Los líderes de los Gobiernos de España, Francia e Italia expresaron este viernes su indignación por los ataques israelíes a la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas para el Líbano (Finul), que califican de "injustificables" y de "grave violación" de las obligaciones de Israel y del derecho internacional humanitario.
En una declaración conjunta difundida por los tres Ejecutivos, subrayan su condición de "naciones que contribuyen desde hace mucho tiempo a la Finul y socios del Líbano e Israel", y condenan el reciente ataque a las fuerzas de la ONU en Naqura, en el que varios de sus efectivos resultaron heridos.
"Estos ataques constituyen una grave violación de las obligaciones de Israel en virtud de la resolución 1701 de las Naciones Unidas y del derecho internacional humanitario", señala la declaración, que añade que los ataques "deben terminar inmediatamente".
Con esa resolución, el Consejo de Seguridad de la ONU acordó en 2006 el destacamento de tropas internacionales de paz en el Líbano.
Los gobernantes de España, Francia e Italia recuerdan que "todo el personal de mantenimiento de la paz debe ser protegido" y reiteran sus elogios por el compromiso continuo e indispensable de las tropas y el personal de esa fuerza en el actual contexto, formada por varios países.
"Contamos con el compromiso de Israel, con la seguridad de las misiones bilaterales y de la ONU de mantenimiento de la paz en el Líbano, así como con las organizaciones internacionales activas en la región", señalan antes de pedir un alto el fuego "inmediato".
Piden, además, la plena implementación de la resolución 1701 -que exige un cese total de las hostilidades entre Israel y el grupo libanés Hizbulá, la retirada de las fuerzas israelíes del Líbano para ser reemplazadas por fuerzas libanesas y de la Finul y el desarme de grupos armados.
Esa es, asegura, "la única manera de permitir que los israelíes y los libaneses regresen a sus hogares en condiciones de seguridad".