Las muertes de David de los Santos, Richard Báez y José Gregorio Custodio, quienes murieron luego de estar bajo custodia policial eran "perfectamente evitables".
A esa conclusión arribó la oficina del Defensor del Pueblo, y que incluyó en un informe sobre los decesos de los tres jóvenes, dado a conocer este martes.
"Eran perfectamente evitables y el factor común en cada una de ellas fue la arbitrariedad, el abuso, el incumplimiento, la inobservancia, el exceso y hasta la connivencia que pudo observarse en estos casos", subrayó la entidad en el documento.
El informe establece que, en cada caso, los derechos mínimos de estas personas fueron abiertamente vulnerados, independientemente del propósito de la detención, pues estas personas perdieron sus vidas por cuestiones tan elementales como la falta de comunicación de los mismos con sus familiares o de una atención médica oportuna y humana.
Señala que además de la responsabilidad penal individual que determinarán los tribunales de la República, "las acciones u omisiones aún bajo investigación indican que la Policía Nacional ha comprometido, tal como lo establece el artículo 148 de Constitución, la responsabilidad del Estado y la de sus funcionarios o agentes por los daños y perjuicios ocasionados a las personas".
La oficina del Defensor del Pueblo hizo un llamado a la ciudadanía a denunciar por todos los canales disponibles, las acciones y omisiones que pongan en riesgo la vida o atenten contra la dignidad y la integridad de las personas detenidas en los distintos recintos policiales o cualquier centro de detención provincial.