Martín Decena, el chofer dominicano que fue secuestrado cuando conducía un autobús con destino a Haití, fue recibido en el Aeropuerto Internacional Presidente Joaquín Balaguer por el viceministro para Asuntos Consulares y Migratorios del Ministerio de Relaciones Exteriores (MIREX), Jatzel Román, acompañado del director de Protección a Nacionales en el Exterior, Cándido Omar Mercedes Polanco.

Tras ser liberado el sábado luego de seis días en cautiverio, Martín Decena recibió las atenciones médicas de lugar en la embajada dominicana en Puerto Príncipe, hacia donde fue trasladado en primera instancia por órdenes impartidas por el jefe de la misión diplomática, embajador Faruk Miguel.

El MIREX informó que, en una comunicación con el canciller, Roberto Álvarez, Decena agradeció el apoyo del Gobierno dominicano del presidente Luis Abinader, así como del personal diplomático que se mantuvo en contacto permanente con sus familiares en el país.

La Cancillería enfatizó que el primer pilar de su política exterior es la protección a los dominicanos que se encuentran fuera del territorio nacional y en ese sentido enfoca su accionar a través de los 47 consulados así como 30 secciones consulares en igual número de embajadas.

El resto de secuestrados

El dominicano fue liberado, junto a la azafata haitiana del autobús que fue secuestrado en Haití el domingo 8 de mayo, debido a que se encuentra en mal estado de salud, según afirmó el embajador dominicano en Puerto Príncipe.

No se informó aún de la situación en la que se encuentran los pasajeros del autobús, entre los que figuran ocho ciudadanos turcos, cooperantes que viajaban de forma habitual a Haití para trabajar en proyectos de educación, según el cónsul honorario de Turquía en Puerto Príncipe, Hughes Josué.

El autobús, de la compañía dominicana Metro, fue secuestrado el pasado domingo en la comuna de Croix-des-Bouquets, a las afueras de Puerto Príncipe, en una zona controlada por la banda delictiva 400 Mawozo que raptó el año pasado, en la misma zona, a un grupo de 17 religiosos extranjeros, 16 de ellos estadounidenses y un canadiense, que permanecieron dos meses en cautiverio.

En esa misma zona fue secuestrado el 28 de abril pasado el diplomático dominicano Carlos Guillén Tatis, quien permaneció cuatro días en cautiverio.

Los secuestros se han multiplicado en los últimos dos años en Haití con la proliferación de las pandillas, que han convertido los rescates en una de sus principales fuentes de financiación.