Oficiales del Ejército de la República Dominicana (ERD) que fueron puestos en retiro hace casi un año, denunciaron que aún no reciben los fondos de sus ahorros obligatorios acumulados durante sus años de servicio.

A los militares activos se les retiene una parte de su salario y se deposita en el Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas (ISSFFAA) para ser recibidos una vez que pasan a retiro.

Los militares han recibido sus sueldos de pensionados por la Junta de Retiro y Pensiones de las Fuerzas Armadas, que varían de 33,000 a 175,000 pesos al mes, según su rango. No obstante, están a la espera de la entrega de sus ahorros en el ISSFAA.

Los jubilados, que fueron puestos el retiro el día 8 de febrero de 2023, declararon que las autoridades les retienen ilegalmente sus recursos, los cuales fueron descontados de su sueldo durante su carrera militar, con el propósito de recibir una remuneración equivalente a un sueldo por cada año de servicio al concluir su tiempo en las filas.

Los oficiales generales, coroneles, superiores y subalternos que se jubilaron a principios de 2023, algunos por elección propia, otros por discapacidad y antigüedad en el servicio, y a quienes se les debía pagar sus ahorros correspondientes en un tiempo máximo de tres meses después de su retiro.

“Nos informan en el Departamento de Planes de la entidad que todos están en proceso de pago, pero han pasado 11 meses y no nos han reembolsado el dinero que ahorramos en el programa "Sueldo por Años", señaló uno de los oficiales afectados por el retraso en la devolución de los fondos.”

Según informan, solo los generales y otros oficiales con conexiones en las áreas superiores de la institución han logrado recibir la indemnización, mientras que aquellos que no cuentan con padrinos en la entidad deben seguir esperando a que las autoridades decidan pagar.

Según la página de transparencia del ISSFAA, el Plan de Sueldo por Año consiste en el pago de un sueldo por cada año de servicio ininterrumpido a los miembros de las Fuerzas Armadas al momento de su retiro, con derecho a pensión, y para aquellos soldados que son separados de las filas con más de 10 años de servicios.

En el periodo comprendido entre julio y setiembre, la entidad militar pagó la suma de RD$ 211,755,524.93 por concepto del plan Sueldo por Año, mientras que, por cancelaciones a militares con más de 10 años en servicios, entregó el monto de RD$ 2,323,526.30. Sin embargo, los meses siguientes de 2023 no se registran pagos por ese concepto en su página web.

El Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas está experimentando una falta de fondos para llevar a cabo varios programas, debido al mal uso del dinero aportado por los militares en administraciones anteriores, sobre todo en el periodo 2005-2012.

Durante el periodo indicado, el Ministerio de Defensa llevó a cabo auditorías internas que revelaron un malgasto de más de 1,500.00 millones de pesos de los aportes de los integrantes de las instituciones castrenses a la Seguridad Social de las FF. AA, y que ahora se refleja en sus operaciones.

Durante 2007 y 2011, la entidad tuvo un déficit superior a los RD$ 8 00 millones, los cuales se utilizaron de manera indebida, según rezan informes de ese período, donde se gastaron más de lo que se generó.

Esto llevó al Ministerio de Defensa a transferir las carteras de préstamos y otros programas a la recién creada Cooperativa de Ahorros, Créditos y Servicios de las Fuerzas Armadas (Coopinfa), debido a la evidente falta de liquidez.

Con el objetivo de reducir el déficit acumulado en los últimos 20 años, el actual ministro de Defensa, teniente general Carlos Luciano Díaz Morfa, ha revisado la resolución 3-2017, la cual permitía obtener el beneficio del "sueldo por año" de forma automática, sin necesidad de hacer aportes.

Los militares retirados con más de cinco años en el rango son ascendidos automáticamente al rango superior inmediato y reciben las remuneraciones del Sueldo por Año, basados en el último ascenso, lo que también provocó una mayor crisis en la entrega de esos fondos.

Reporteros del periódico Acento buscaron obtener una respuesta por parte de alguna autoridad del Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas, sin embargo, fueron remitidos al Ministerio de Defensa.