Varios miembros de la familia Morales Pinedo visitaron recientemente Bruselas, donde el 11 de diciembre de 1971 fue salvajemente asesinada Miriam Pinedo, viuda de Otto Morales Efres, dirigente del Movimiento Popular Dominicano. Se trata de Yuri Morales Pinedo, de su esposa, Diana González de Morales y de sus hijos Cari Massiel y Yuri Daniel Morales González, hijo, nuera y nietos de Pinedo y de Morales Efres, respectivamente. Les acompañaron la señora América Pinedo Mejía y su esposo, el señor Jorge Rodríguez.

Otto Morales Efres, uno de los organizadores del secuestro del teniente coronel Donald J. Crowley, agregado militar de la Embajada de los Estados Unidos, fue asesinado el 16 de julio de 1970, a finales del primer gobierno de Joaquín Balaguer, por miembros de una patrulla mixta compuesta por agentes de la Policía y el Ejército Nacionales.

El secuestro tuvo como objetivo el canje del militar por veinte presos políticos entre los que se contaba a Maximiliano Gómez Horacio, el Moreno, secretario general del MPD, quien, luego de transitar por México y Cuba, se había establecido en Europa junto a una parte de los presos canjeados.

En agosto de 1970, la señora Pinedo se estableció en Bruselas junto a sus cuatro hijos, de los cuales Yuri Morales Pinedo era el menor. El 23 de mayo de 1971, la señora Pinedo viuda Morales salvó milagrosamente su vida en un confuso incidente en el que perdió la suya Gómez Horacio. Finalmente, el 11 de diciembre de 1971, fue brutalmente asesinada y descuartizada, con toda probabilidad por  varios de los miembros del Movimiento Popular Dominicano liberados por la iniciativa encabezada por Otto Morales y Amín Abel Hasbún.

La visita incluyó el Hospital Saint Pierre, donde Miriam Pinedo fue internada; la casa marcada con el número 94 de la calle van Aa, donde esta se estableció junto a sus cuatro hijos; la escuela de la calle van Volsem, en la que fueron inscritos; los estanques de Ixelles, donde fueron encontrados parte de los restos de la señora Pinedo; y la residencia de la señora Yvonne Dellieu, quien la ayudó durante su penosa estadía en la capital belga.

Estas visitas tuvieron una importante carga emocional. En efecto, fue en el Hospital Saint-Pierre donde varios miembros del MPD se negaron a que Miriam Pinedo retornara a Santo Domingo con su hermana América, quien viajó a Bruselas con tales fines. Amenazada de muerte, no tuvo otra opción que retornar al país solo con sus cuatro sobrinos, dejando a Pinedo viuda Morales en manos de los que serían sus asesinos. A continuación, sus familiares depositaron una ofrenda floral el la estatua “Pascale”, vecina a los mencionados estanques, donde, en diciembre de 2021, tuvo lugar un acto similar patrocinado por la Embajada de la República Dominicana, como manifestación por la no-violencia contra la mujer.

Particularmente emotivo fue el encuentro que tuvo lugar en la residencia de la familia Blanco-Dellieu. Bladimiro Blanco Martinez, quien laboró bajo las órdenes de Morales Efres, fue uno de los miembros del MPD que viajó a Europa para investigar el atroz crimen. Yvonne Dellieu no solo apoyo materialmente a la señora Pinedo, como ha quedado dicho, sino también moralmente. La señora Dellieu inscribió sus hijos en la escuela, la inscribió en clases de francés y,  luego de que fuese dada de alta, la acogió en su residencia. Fue de esta de donde, utilizando el engaño, Freddy Díaz, alias Manolo Plata, , no conforme con imponer la presencia de dos de sus compañeros, se la llevó algún tiempo antes de que su cuerpo apareciera en dos maletas en las calles de Bruselas.

Finalmente, la familia Morales fue recibida por el licenciado Iván Ogando Lora, embajador plenipotenciario de la República Dominicana ante el reino de Bélgica, el gran ducado de Luxemburgo y la Unión Europea, y por su esposa, la licenciada Laura Pujols.

América Pinedo Mejía y Yuri Morales Pinedo no habían retornado a Bruselas desde 1971. Para el resto de la familia fue el primer viaje a la capital de la Unión Europea.

La familia de Miriam Pinedo y Otto Morales estuvo acompañada de Pablo Gómez Borbón, autor de “Morir en Bruselas”, quien les sirvió de guía.