En el marco del Segundo Seminario Internacional Justicia con Perspectiva de Género: Un Paso hacia la Igualdad, las magistradas Martha Cristina Díaz Villafaña, comisionada de la Comisión Permanente de Género y Acceso a la Justicia de la Cumbre Judicial Iberoamericana, y Roxana Chacón, de la Corte Suprema de Justicia de Costa Rica, destacaron la urgencia de implementar políticas públicas orientadas a la prevención y educación para combatir la violencia de género, en especial los feminicidios.
Durante el evento, Díaz Villafaña reveló que, a nivel mundial, cada 10 minutos ocurre un feminicidio, una cifra que calificó como alarmante.
Subrayó que este flagelo afecta a las mujeres de múltiples formas, incluyendo violencia física, psicológica, simbólica y política.
La violencia de género es la mayor forma de discriminación, tal como se especificó en la Convención de Viena de Derechos Humanos en 1993. Esto exige que los Estados y los poderes judiciales implementen mecanismos efectivos para su erradicación, expresó.
La magistrada enfatizó que, si bien la sanción penal es necesaria, no es suficiente para eliminar la violencia contra las mujeres. Propuso iniciativas de concientización y educación para abordar el problema desde su raíz.
Por su parte, Roxana Chacón resaltó la importancia de la prevención como herramienta fundamental para reducir los casos de feminicidio en el futuro.
“Aunque en América Latina contamos con legislación en materia de violencia de género, debemos enfocarnos en la educación desde la infancia y la adolescencia. Ministerios de Educación, oficinas de la mujer y defensorías del pueblo tienen un papel crucial en la formación en derechos humanos y la promoción de una cultura de respeto”, señaló.
Chacón también destacó la relevancia del 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, en memoria de las hermanas Mirabal, asesinadas en República Dominicana en 1960.
Ambas magistradas coincidieron en que la violencia de género es un problema que requiere el esfuerzo conjunto de los poderes judiciales, las instituciones gubernamentales y la sociedad en general. “La prevención y la capacitación son claves para construir un futuro libre de violencia para las mujeres”, concluyeron.
El seminario reunió a representantes de diversos países de Iberoamérica, quienes reafirmaron su compromiso de trabajar en políticas y estrategias integrales que garanticen justicia con perspectiva de género y fomenten la igualdad.