La frontera de República Dominicana con Haití está en calma y "resguardada frente a cualquier tipo de amenaza que pueda surgir" tras la última escalada de violencia en el vecino país, informó este domingo a EFE el Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfront).

"Se están tomando todas las medidas de lugar y trabajando coordinada y conjuntamente con el Ejército en el control de los pasos fronterizos formales y toda la franja fronteriza terrestre", aseguró el organismo.

Según el Cesfront, "se está siendo bien riguroso" con las medidas ya adoptadas anteriormente en las zonas limítrofes.

El control de la frontera es especialmente estricto desde la crisis bilateral generada por la construcción en la parte haitiana de un canal en el limítrofe río Masacre, que en septiembre llevó a las autoridades dominicanas a incrementar la presencia militar en Dajabón (noroeste del país).

Fotografía de archivo en la que se registró a un militar dominicano al hacer vigilancia en el borde del río Masacre, frontera natural con Haití, en Dajabón (República Dominicana). EFE/Eddy Vittini

La frontera de República Dominicana con Haití es un punto especialmente sensible ante la situación que vive el vecino país, donde la violencia se ha disparado aún más desde el pasado jueves, tras conocerse que el primer ministro haitiano, Ariel Henry, se habría comprometido a celebrar elecciones antes del 31 de agosto de 2025.

Tras dos días de tiroteos y ataques por parte de las bandas armadas que controlan gran parte de Puerto Príncipe y otras zonas del país, la máxima tensión se vivió la pasada anoche cuando dichos grupos asaltaron la Penitenciaria Nacional, en la capital, de donde pudieron escapar numerosos delincuentes importantes.

Haití está a la espera del despliegue de una misión multinacional de apoyo a la seguridad que ayude a poner freno al terror que imponen las bandas con sus matanzas, secuestros, violaciones y ataques.

Unos 3.600 presos huyeron de la cárcel de Puerto Príncipe

Cerca de 3.600 presos se fugaron tras el asalto de las bandas armadas anoche a la cárcel civil de Puerto Príncipe, lo que supone al menos un 97 por ciento del total de los internos (3.696), informó este domingo el Colectivo de Abogados para la Defensa de los Derechos Humanos (CADDHO).

Entre el centenar de presos que decidió no abandonar el recinto carcelario se encuentran los mercenarios colombianos acusados de participar en el asesinato de presidente haitiano, Jovenel Moise, en 2021, quienes ya la pasada noche enviaron mensajes que circularon por redes sociales relatando la angustiosa situación vivida durante el asalto.

Uno de ellos explicó a los medios que accedieron al interior del recinto, entre ellos EFE, por qué no huyó: "No me volé porque no debo nada. Estoy viviendo un karma, solamente Dios sabe lo que estoy viviendo y lo que me ha tocado vivir. No me volé porque no debo nada y aquí estoy dando la cara porque soy inocente, soy inocente ante el ante el mundo, así que no debo nada".

"Estoy acá en esta prisión, en este momento la prensa puede dar cuenta de cómo es este lugar. Soy inocente, yo a este lugar, Haití, vine con una propuesta de trabajo", dijo ante los medios Francisco Eladio Uribe, exsoldado de Colombia.

El Gobierno de Colombia pidió este domingo a Haití protección especial para esos 17 ciudadanos suyos y planteó al Gobierno que se evalúe la posibilidad de trasladarlos a otra cárcel que ofrezca mayor seguridad.