Julio Romero, el dirigente político que ahora aspira a la alcaldía por Santo Domingo Este por la Fuerza del Pueblo (FP), está intentando defenderse de la relación sexual ilegal  que tuvo hace 14 años con una menor.

Aunque el político se excusa en que fue un "error", en realidad que un adulto tenga relación sexual con un menor de edad es un delito tipificado en el Código para el Sistema de Protección y los Derechos Fundamentales de Niños, Niñas y Adolescentes o ley 136-03, y por las legislaciones anteriores a este código, como la 14-94.

La ley es clara cuando establece que un menor de edad no está en capacidad para dar consentimiento a un adulto para una relación íntima ni para casarse.

La selección de Julio Romero para candidato a la alcaldía de Santo Domingo Este, por el partido Fuerza del Pueblo, que lidera Leonel Fernández, ha generado un rechazo generalizado en la ciudadanía, sobre todo en activistas pro derechos de las mujeres y los niños, niñas y adolescentes.

Hasta el momento el partido Fuerza del Pueblo no ha dado ninguna explicación ni ha pedido excusas por elegir a Romero para la importante candidatura con miras a las elecciones municipales de febrero de 2024.

El exlegislador  justificó su acción diciendo que dicha adolescente había estado casada antes de sostener esa relación con él e indicó que así lo muestra el acta de matrimonio No 000736 del año 2008, así como el acta de divorcio No. 000026 del año 2010.

"Hace 14 años, un error afectó a mi familia, mi entorno y la percepción que tienen muchos sobre mí. Hace 14 años conocí a una joven mujer, a la que en todo momento presumí como adulta, porque antes de conocernos ya había estado casada, contando con el consentimiento de sus padres. Así consta en el acta matrimonial número 736 del año 2008″, sostiene en un vídeo que puso a circular este jueves.

Sostuvo que fue una relación de corta duración de la que, sin embargo, nació un niño ahora adolescente de 13 años, al cual -remarcó- "he amado, protegido y cuidado durante todo este tiempo".

Aseguró que lo sucedido hace 14 años no lo define como ser humano, y eso lo explica -añadió- "el alto nivel de compromiso, amor y abnegación profesado tanto a la familia como al niño".

“He trabajado incansablemente para mejorar. Las partes afectadas me han perdonado. He recibido el perdón de mi esposa y hemos salvado nuestro matrimonio de 34 años. Sostengo una relación de respeto y responsabilidad con esa joven, que hoy tiene 30 años, que ha tenido la oportunidad de desarrollarse, de casarse de nuevo y vivir en el extranjero”, dijo Julio Romero.