Un infante de un año y 10 meses de nacido murió ahogado en una cubeta con agua en el Centro de Atención Integral de Primera Infancia (Caipi) de Pueblo Nuevo, en San Francisco de Macorís, provincia Duarte.
Se trata del niño Maikel Esmil Castro Álvarez, cuyo cadáver fue trasladado al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), en el hospital universitario San Vicente de Paúl, en donde la madre lloraba desconsoladamente.
"Dios mío, me quitaron a mi único hijo", gritaba la mujer identificada como Kaileny Álvarez.
El Instituto Nacional de Atención Integral a la Primera Infancia (Inaipi) informó que investiga las circunstancias del hecho, y prometió que establecerá las responsabilidades y consecuencias correspondientes.
La primera dama Raquel Arbaje lamentó lo sucedido y se solidarizó con la familia del niño fallecido.
"Estoy profundamente conmovida por la muerte de Maikel Esmil, un bello niño, mientras estaba al cuidado del Caipi Pueblo Nuevo, en SFM. Sé que nada que yo diga aliviará el dolor de la madre, pero quiero que sepa que estoy con ella y le hago llegar mi solidaridad y apoyo", publicó la esposa del presidente Luis Abinader a través de Twitter.
Mientras que el senador de la provincia Duarte y vocero del bloque de senadores del PRM, Franklin Romero, también expresó su pesar por la muerte del infante, y pidió que se investigue las circunstancias del hecho.
“Con profundo pesar, hemos recibido la funesta y desgarradora noticia de la muerte de un infante en el centro CAIPI del sector Pueblo Nuevo, de este municipio de San Francisco de Macorís. Nosotros, los padres, nunca estamos preparados para recibir una noticia como esta. En ese sentido, las circunstancias que rodean al hecho deben ser investigadas con la responsabilidad debida, acorde al protocolo que se debe de llevar en la seguridad de los niños en estos centros infantiles, que se supone deben ser de extrema seguridad”, expresó el legislador.