El Segundo Tribunal Colegiado de La Vega dictó 20 años de prisión en contra de un hombre acusado de provocarle la muerte a su pareja a causa de heridas de armas blancas, en un hecho ocurrido en la casa donde ambos convivían, ubicada en el sector Palmarito, en el año 2019.

La sentencia condenatoria en contra de Jean Carlos Genao de Jesús o Jan Carlos Genao de Jesús por la muerte de su pareja Luisa María Báez Espino, de 29 años de edad, deberá ser cumplida en el Centro de Corrección y Rehabilitación (CCR) El Pinito, de La Vega.

El Ministerio Público demostró en el juicio que el procesado fue arrestado en flagrante delito en fecha 11 de noviembre de 2019, alrededor de las 10:22 de la noche, cuando agredió a Báez Espino, a quien provocó la muerte a causa de múltiples heridas de armas blancas en el cuello, el tórax y las manos.

El informe de autopsia judicial No. 694-2019, de fecha 19 de noviembre de 2019, establece en las consideraciones médico legal “que es una muerte violenta, de etiología médico legal homicida, cuyo mecanismo de muerte fue por choque hipovolémico, muerte que se produjo de forma rápida”.

El expediente señala que el hecho ocurrió en momentos en que la pareja llegó a su vivienda e iniciaron una discusión durante la cual la víctima pidió auxilio a sus vecinos.

Detalla que cuando los vecinos llegaron al lugar Genao de Jesús se negó a abrir la puerta por lo que estos procedieron a llamar al Sistema de Atención a Emergencias y Seguridad 9-1-1, presentándose al lugar agentes policiales que cuando procedieron a abrir la puerta encontraron el cuerpo sin vida de la víctima.

Durante la inspección en la escena del crimen fueron ocupados los dos cuchillos de ocho y once pulgadas utilizados por el procesado para matar a su pareja, el cual no conforme con las estocadas que le propinó en principio, al romperse el cuchillo que estaba utilizando, tomó otro con el que le provocó otras heridas.

En el transcurso de la investigación se estableció Genao de Jesús y Báez Espino estaban en proceso de separación y que el victimario le había pedido unos días a su pareja para irse de la casa.