El juez Amauri Martínez, del Tercer Juzgado de Instrucción del Distrito Nacional, favoreció al imputado en el caso Medusa Alfredo Alexander Solano con el cese de la prisión preventiva e impuso una garantía económica de 10 millones de pesos, a través de una aseguradora, conjuntamente con arresto domiciliario y en consecuencia con impedimento de salida del país.
Luego de su decisión, el magistrado argumentó que después de examinar la norma jurídica prevista por el legislador y que este imputado ya contaba con más de los 18 meses tras las rejas, siendo este el plazo máximo que dispone el Código Procesal Penal de la prisión preventiva, procedió con el beneficio.
Al salir de la sala, la procuradora de Corte Mirna Ortiz dijo que las decisiones de los tribunales están basadas en un pensamiento ortodoxo.
Explicó que los tribunales dominicano no están preparados aún para ser menos ortodoxos y así atender con menos rigidez casos de esta magnitud, al igual que la legislación del país tampoco se encuentra adaptada para ello y por eso "es importante un examen de la Ley conforme a las nuevas tendencias”.
Ortiz resaltó que los plazos deben ser entendidos por la complejidad de la obtención de las evidencias.
Alfredo Alexander Solano es acusado de contratación de supuestos servicios de transporte que los firmantes de los contratos no ejecutaban, y el dinero era utilizado por los acusados.
En la acusación se detalla que Solano Augusto y Jonnathan Joel Rodríguez Imbert, también encartado en este proceso, luego de firmados los contratos, se comunicaban con los supuestos prestadores de servicios y les decían que en sus cuentas se había depositado por error unas cantidades de dinero que debían retirar y entregar junto a una tarjeta de débito a la persona que designaban para tales fines.