Ahora mismo (cerca de las 6 de la tarde hora dominicana), la escritora dominicana Yildalina Tatem Brache relata a Acento que escucha sirenas de ambulancias en los alrededores del Palacio Quemado, sede del Ejecutivo de Bolivia, y que ya no tiros de fusilería de los golpistas.
Tatem Brache se encuentra alojada en un hotel cercano a la Plaza Murillo, en uno de cuyos costados se levanta el Palacio Quemado en La Paz, adonde asiste a un congreso, y desobedeciendo al personal hotelero que prefiere que sus huéspedes no salgan de sus instalaciones, salió ella a conversar con los trabajadores de los establecimientos comerciales próximos mientras cerraban las puertas y se ponían a buen resguardo.
"Me dicen que no abrirán en los próximos días hasta que el ambiente se aclare y la seguridad les permita volver al trabajo", relató a Acento.
La nacida en Salcedo, Provincia Hermanas Mirabal, cuenta que no ha visto personas lesionadas por lo que desconoce las razones de la presencia de las ambulancias en el lugar.
"En el lobby del hotel escuchamos versiones de quienes estiman que la mayoría de soldados ha rechazado este intento de golpe de Estado y llega información de que hay fuerte movilización popular y decisión de resistencia", añadió poco antes de que los militares golpistas se retiraran del lugar y llegaron los manifestantes que repudian la intentona.
