El embajador Iván Ogando Lora, en representación del Gobierno Dominicano, participó en la sesión del Comité del Parlamento Europeo para las Relaciones con los Países de Centroamérica (DCAM), ante la cual destacó la tensión que existe entre República Dominicana y Haití por la construcción de un canal en el río Dajabón (Masacre), así como la situación por la que atraviesa el Estado dominicano a raíz de la crisis que afecta al país vecino, y la necesidad de acciones por parte de la comunidad internacional que vayan en auxilio de los haitianos.
En la sesión, en la que se presentó el informe de la visita de dicho Comité a la República Dominicana en mayo pasado, el embajador Ogando Lora valoró en su intervención que el informe del DCAM destaca la estabilidad política, el crecimiento económico sostenido y el entorno de paz y desarrollo social que hay en la República Dominicana, así como los esfuerzos del gobierno actual en la lucha contra la corrupción.
En particular, el embajador saludó que los europarlamentarios reconocieran de manera explícita en su informe que “la migración haitiana a la República Dominicana, debido a su volumen y características, así como a su potencial de desestabilización política, económica y social en el estado de acogida, puede caracterizarse como una emergencia nacional”.
Subrayó que en el documento también se constata que las autoridades dominicanas enfrentan la saturación de los centros de acogida y regularización de inmigrantes y de sus servicios sociales, en particular en las áreas de salud y educación.
El embajador Ogando Lora aprovechó la ocasión para informar a la DCAM sobre la situación generada por la construcción ilegal de un canal de trasvase en el río Dajabón por la parte haitiana, lo cual viola los acuerdos fronterizos y representa una amenaza del recurso hídrico compartido. En tal sentido, agregó que ante la falta de acción por parte de las autoridades haitianas para detener dicha construcción, el Gobierno Dominicano ha cerrado temporalmente la frontera.
El diplomático concluyó reiterando la posición dominicana sobre la imperativa necesidad de la intervención de la comunidad internacional para resolver la crisis haitiana, pero resaltó que mientras se espera por ello, es justo que el Gobierno Dominicano adopte las medidas que estime necesarias para defender los intereses nacionales.