“¿Tú mamá con quién se queda ahora?”, es el lamento de una de las amigas de David ante el asesinato de este joven supuestamente a manos de la Policía Nacional.

Quienes conocían a David de los Santos, un joven de 24 años de edad, lo describen como “un gran ser humano”.

Sus amigos contaron a la prensa que David era el sustento de su familia por lo que les preocupa el bienestar de su madre ahora que físicamente él ya no está.

“Somos hermanos, David era un gran ser humano, era el sustento de su familia. Estamos aquí porque amamos a David, pero tu mamá ¿con quién se queda ahora? Simple y llanamente porque unas personas no tuvieron la capacidad de lidiar con una persona. No fue a un perro que mataron, fue a una persona”, expresó entre lágrimas Carolina Ubiera, amiga de la víctima.

Sus amigos exigen justicia y el apresamiento de los agentes que se encontraban en el cuartel del ensanche Naco la noche en la que David fue detenido.

“Si no lo hacen ellos lo vamos a hacer nosotros (refiriéndose a hacer justicia). Queremos a todos los que estuvieron ahí presos, que no digan que lo van a suspender porque luego lo mandan a un pueblo y adiós bye bye”.

Sostuvieron que llegaran hasta las últimas consecuencias, no solo por David, sino también por otros jóvenes que han pasado por lo mismo y para que nadie más tenga que enfrentar la “brutalidad policial”.

El sueño de David

"El sueño de David era hacerle la casa a su madre y luego mudarse del barrio. Al menos logró hacerle la casa pero ya no podrá salir del barrio".

Esto lo cuenta Lerian Contreras, amigo de David y una de las personas que lo encontró en el hospital.

Dice que David era graduado en Educación Física y trabajaba en un call center o centro de llamada y que con el sueldo que devengaba allí fue que pudo construirle la casa a su madre.

Sobre lo que dice la Policía de que él sufría de "problemas mentales", Contreras señaló que lo conocía desde que tenía 15 años de edad y que nunca padeció de ningún tipo de enfermedad mental.

Sobre el caso

El miércoles 27 de abril los familiares de David lo reportaron como desaparecido al ver que esa noche no llegó a casa.

Preocupados por su paradero hicieron una publicación en redes sociales y alguien les respondió que había visto a David en una plaza comercial pero que también vio el momento en el cual la Policía se lo llevaba detenido supuestamente por haber tenido un percance con una señora dentro de la plaza comercial.

El jueves en la noche cuando se enteran de que David estaba en el cuartel del ensanche Naco, le informan que podían pasar a recogerlo al otro día en la mañana. Al llegar al destacamento le dicen que hizo una crisis, que empezó a golpearse y una unidad del 9-1-1 se lo había llevado a un hospital, pero no especificaron a cual.

En la búsqueda lo encontraron tirado en una camilla en el hospital Moscoso Puello. Su cuerpo estaba lleno de contusiones, la boca ensangrentada, las manos hinchadas, golpes por todo el cuerpo, deshidratado y desnudo.

Según sus familiares, cuando lo encontraron ya él tenía 24 horas inconscientes y no le habían brindado atenciones médicas. De ahí tuvieron que trasladarlo al hospital Darío Contreras donde falleció en la noche del domingo.