El 75% de los directores ejecutivos asegura que la atracción y retención de talento es la cuestión que más les preocupa para los próximos meses, aunque apenas tres de cada 10 cree que su empresa está bien preparada para afrontar este desafío.

La resiliencia empresarial (73%), el foco en el cliente (69%), la transformación digital (66%) o el impacto de la geopolítica en el contexto económico (60%) representan sus otras grandes inquietudes.

Tras este amplio ejercicio de reflexión, el documento concluye que la época de certezas ha terminado. Nos hemos instalado en la incertidumbre. Asistimos a un escenario volátil en el que la geopolítica, inteligencia artificial y la polarización, impactarán en la gestión del talento, en las relaciones con el cliente y en las cuestiones sociales, lo que exigirá direcciones empresariales resilientes y activistas.

Ante esto, la directora general para América Latina de Llorente y Cuenca, María Esteve, dijo que en el actual panorama empresarial, la gestión de la reputación se erige como un pilar esencial, debido a que se debe impulsar la confianza de los grupos de interés y tratar de fortalecer las relaciones comerciales.

“El liderazgo activo y efectivo se torna crucial para orientar a las organizaciones en entornos dinámicos, adaptándose a las tendencias emergentes. El impulso de la colaboración público-privada se presenta como una estrategia clave, potenciando sinergias y abordando desafíos colectivos, todas estas prácticas son imperativas para el éxito sostenido de las organizaciones en el cambiante y desafiante escenario”, explicó.