Al recorrer el Distrito Nacional, los transeúntes son testigos de las construcciones, cuya mano de obra inicia desde tempranas horas de la mañana. Los edificios, de hasta 12 pisos, parecen ir buscando el cielo, y a su vez, evidencian el dinamismo económico de República Dominicana.

Las licencias de construcción otorgadas al sector privado decrecieron un 10.1 %, al pasar de 1,560 en 2022 a 1,401 en 2023, por un valor tasado en RD$ 110,837.3 millones. De hecho, las del año pasado quedaron por debajo de las 1,403 del 2019, según la Oficina Nacional de Estadística (ONE). 

Sin embargo, este panorama de desarrollo y prosperidad se aleja de la realidad de la clase media nacional, que recibe cada mes RD$ 34,663 (US$ 589) en promedio por su labor en el sector formal, 23.1 % menos que el costo de la canasta básica situada en RD$ 45,101, al cierre de marzo del 2023. 

Estadísticas del Banco Central y Tesorería de Seguridad Social establecen que una persona debe “buscar” más de RD$ 10,438 mensuales para vivir en el Gran Santo Domingo.

Si bien República Dominicana cuenta con su moneda oficial (RD$), el sector inmobiliario, principalmente en sectores como Piantini, Gazcue y Bella Vista, los alquileres y ventas de apartamentos se promocionan en moneda extranjera, especialmente en dólares. 

Ante esta situación, el director ejecutivo de la Asociación de Agentes y Empresas Inmobiliarias (AEI), Alberto Bogart, aclaró que se transan en dólares debido a la plusvalía y su fortaleza en el país.

En sectores de clase media-alta como Piantini y Ensanche Quisqueya los alquileres de renta de largo plazo van desde US$ 900 y pueden superar los US$ 1,500 mensuales, según las amenidades de la torre, el complejo residencial y el nivel de piso. Es decir, si una pareja, sin hijos, devenga RD$ 100,000, deberá destinar RD$ 52,200 al pago de renta.

En la avenida José Contreras van desde US$ 800 (RD$ 46,400) hasta US$ 1,000 (RD$ 58,000), según la cantidad de metros cuadrados, precios que se alejan del promedio salarial nacional.

Pero la venta puede ascender a RD$  7 millones por uno de tres habitaciones y dos baños en un cuarto nivel, sin balcón ni terraza.

Las parejas encontrarán entre las avenidas Alma Mater e Independencia carteles que ofertan un apartamento de dos habitaciones por US$ 900 (RD$ 52,200), RD$ 17,537 más que el salario promedio cotizable en la TSS, con la condición de que debe ser una renta mínima de 12 meses. 

Adentrándose a los sectores aledaños a la avenida Independencia, un apartamento en un segundo piso pueden costar un mínimo de RD$ 25,000, no obstante, el futuro inquilino deberá pagar dos depósitos (RD$ 50,000) y una comisión (RD$ 25,000), lo que elevará el primer pago a RD$ 100,000, sin contar el pago de servicios de agua, luz eléctrica, transporte y alimentos.

En Ciudad Nueva, una casa de tres habitaciones amuebladas puede costar US$ 800, mientras que en el barrio populoso de San Carlos, una pieza habitacional puede ir desde RD$ 8,000, similar a los sectores de Cristo Rey (RD$ 15,000) y Villa Juana (RD$ 20,000).

Detrás de la avenida Máximo Gómez y el Ministerio de Educación se ofrecen apartaestudios por RD$ 12,000 mensual. 

En la avenida Correa y Cidrón, en la Zona Universitaria, se registran inmuebles por un plazo de 1 año de alquiler a estudiantes, por un precio de RD$ 13,000. Pero la venta de un apartaestudio está en RD$ 3.5 millones, similar a un apartamento de tres habitaciones en Ciudad Juan Bosch o de los proyectos Vivienda Feliz.

Sector 

De las 1,401 licencias otorgadas para la construcción en el sector privado, la Oficina Nacional de Estadística (ONE) señaló que 890 corresponden a edificios apartamentos y viviendas, unas 174. Por hospedaje, 27 fueron hoteles, cuatro villas y 10 complejos turísticos, pero cinco destacaron que tendría multipropósito de viviendas y comercio.

Durante el 2023 se destinaron 7,667,474.6 metros cuadrados hábiles para la construcción de nuevos edificios, hospitales, albergues y escuelas. De esta cantidad, el Distrito Nacional (1,087,982.6), La Altagracia (1,056,695.8) y Santo Domingo (3,749,424.7) aportaron el 76.8 % del monto total.

La entidad estatal indicó que se realizaron 9,433 construcciones en el año pasado, de las cuales 6,362 corresponden a apartamentos, 1,251 viviendas y 55 apartamentos y viviendas combinadas. En menor cantidad, los comercios y hospedaje (4), complejos turísticos (141), los hoteles (104) y villas (117).