La ministra de la Mujer de la República Dominicana y presidenta de Comisión Interamericana de Mujeres (CIM) de la OEA, Mayra Jiménez, participó en la inauguración de la Trigésima Novena Asamblea de Delegadas de la CIM-OEA, junto al secretario general de la OEA, Luis Almagro, y María Inés Castillo de Sanmartín, ministra de Desarrollo Social de Panamá.
En sus palabras inaugurales, la ministra Jiménez señaló que "la CIM se nutre de un diálogo entre países que permite establecer agendas y prioridades regionales, como ha ocurrido frente a los retos que desencadenó la pandemia de la COVID-19 para las mujeres, entre los cuales se vio afectado el mercado laboral, donde la participación femenina en el 2020 experimentó, en la región, un descenso de 5 puntos porcentuales respecto al 2019, pasando de un 52,3% a un 47%, así como el incremento de la violencia y la sobrecarga de trabajo no remunerado".
También se refirió a la que llamó "imperante necesidad de continuar ampliando los marcos legales y normativos" de tal suerte que "permitan que las mujeres tengan poder real y no solo nominal".
Entre estos nombró los de la CIM tales como el Protocolo Modelo para prevenir, atender, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en la vida política; la Ley Modelo Interamericana de Cuidados "en la que se reconoce el trabajo doméstico y de cuidados no remunerado, al que las mujeres de la región dedican 3 veces más tiempo que los hombres".
La presidenta de la CIM resaltó que “en la medida en la que nuestros países continúen estrechando lazos y consolidando sus democracias, con la presencia de las mujeres como requisito obligatorio, lograremos revertir el rostro femenino de los indicadores sociales, políticos y económicos que nos colocan atrás y avanzaremos hacia sociedades en las que el presente y el futuro sea femenino”.
La ministra finalizó su intervención haciendo un llamado a continuar trabajando en políticas para la consolidación de sistemas integrales de cuidados, reformas legislativas que fortalezcan la participación política de las mujeres, así como las medidas de prevención, atención, reparación y sanción de la violencia contra las mujeres, las adolescentes y las niñas, al tiempo que expresó que las democracias sólidas son aquellas en las que las mujeres tienen una participación activa.
Luis Almagro y María Inés Castillo de Sanmartín
El secretario general Almagro señaló a su vez que "la creación de alianzas es indispensable para avanzar hacia el desarrollo sostenible y la inclusión de las mujeres".
Precisó que en pleno siglo XXI las Américas "solo tienen a 2 mujeres en los más altos puestos de elección popular de sus gobiernos" y que urge el diseño de políticas públicas de igualdad de género.
“La declaración y el plan estratégico de la CIM 2022-2026 traza una ruta transformadora no solamente a las relaciones de género, sino a la concepción del Estado y visiones feministas de la concepción de la autonomía económica, que tengan en el centro los cuidados y liderazgos que partan del enfoque de la paridad.Desde su fundación la CIM ha sido el foco central de Las Américas para que estos procesos sirvan de motor de cambio”, señaló Almagro.
Por su parte, la ministra de Desarrollo Social de Panamá destacó algunos hitos desde la creación de la CIM en 1928, como haber alcanzado el derecho al voto de las mujeres en todos los países de América, el derecho a postularse para cargos públicos, el investigar, sistematizar y publicar información de las desigualdades e inequidades sobre las mujeres, dando pie a debates sólidos e impulsandola definición de políticas públicas para garantizar los derechos de las mujeres y promover la igualdad.