Bajos salarios, horas extras sin paga y unos cuantos despidos injustificados, son solo algunos de los males que, según empleados de hoteles, predominan en uno de los sectores de más empuje en la economía dominicana: el turismo.

“El personal no tiene como defenderse de los maltratos”, dice Armando Raposo, camarero de un hotel en la zona turística de Bávaro, donde trabaja hace más de tres años y gana un sueldo que sigue por debajo de la tarifa más alta del salario mínimo del sector turismo anunciado hace apenas unas semanas por el Ministerio de Trabajo.

Armando Raposo gana RD$11 mil 440 mensuales y lo que más le preocupa son los supuestos abusos que se comenten en contra de los empleados, como el acusarlos de algunos hechos indebidos para así cancelarlos sin sus prestaciones laborales.

Aunque trabajen horas extras no se las pagan, sufren de discriminación y desigualdad salarial en las mismas funciones, según cuenta Soribel Díaz, otra empleada del sector. La joven lleva siete años trabajando en el spa de un hotel en Punta Cana, pero dice que la situación actual lleva a que “los empleados no sepan a donde parar con tanto abuso y atropello”.

Ambos trabajan en hoteles ubicados en zona del Este, donde se concentran la mayoría de los proyectos turísticos. Solo este año se han aprobado la construcción de alrededor de 100, de los cuales más del 70% se ubican en la provincia La Altagracia, evidenciando el nivel de crecimiento que ha tenido el sector a pesar de la pandemia.

En todo el país se estima que hay más de 85 mil habitaciones, y solo en la provincia La Altagracia unas 50 mil. En los proyectos sometidos y aprobados por el Consejo de Fomento Turístico (Confotur) hay unas 1,500 habitaciones en planes de construcción y 1, 194 en remodelación.

 

Un salario diferenciado

El sector turístico impacta directa e indirectamente a más de 500 mil empleos, según estadísticas del Ministerio de Turismo, y desde la reapertura de los hoteles hasta el mes de noviembre, se han recuperado unos 164 mil empleos formales distribuidos en 6,882 empresas.

Estos trabajadores al igual que los de otros 15 sectores tienen un salario diferenciado, es decir, que se establece un clasificación de tarifa diferente según la actividad económica. Esto se traduce en que se pueden encontrar pequeñas empresas de otro sector que paguen un salario mínimo mayor, a un gran hotel.

El salario mínimo diferenciado en esta actividad se debe, según el presidente de la Confederación Nacional de Unidad Sindical (CNUS), Rafael (Pepe) Abreu, a que a pesar de su crecimiento está en el nominado incentivo a la inversión turística.

Cuando se puso en vigencia la tarifa diferenciada, que también lo tienen otros sectores como zonas francas, construcción, sector azucarero y otros, fue para estimular el inversión, pero según Pepe, ya es un sector desarrollado por lo que no necesita mantener esetrato preferencial.

Nosotros consideramos que no es correcto que esto se produzca, porque hay que tomar en cuenta que cuando se puso en vigencia esa tarifa diferenciada era para estimular la inversión en un sector nuevo. Ahora bien, ese es un sector viejo, con una infraestructura, con un desarrollo que de verdad no es conveniente seguirle manteniendo a ellos, digamos así, ese trato preferencial.

El reciente aumento al salario mínimo para los trabajadores de hoteles, casinos, restaurantes, bares, cafés, cafeterías, clubes nocturnos, pizzerías, pica pollos, negocios de comida rápida, chimichurris, heladerías y otros establecimientos gastronómicos no especificados, no fue lo esperado por ninguno de los sindicatos, ni siquiera por los que firmaron el acuerdo contemplado en la resolución 02-2021, tras una reunión con el Comité Nacional de Salarios (CNS).

Jacobo Ramos, presidente de la Central Nacional de Trabajadores (CNTD), ha sido uno de los que se ha quejado por la decisión de mantener a estos empleados dentro de los que devengan un salario más bajo en el ámbito laboral nacional.

El problema, además de que lo dejaron fuera de las discusiones, es que también quedó en el olvido la propuesta de un aumento de un 40%, quedando solo en un 23% el más alto en 17 años según el Ministerio de Trabajo.

Con esta clasificación, de acuerdo con Pepe Abreu, en cuya organización hay entre 20 a 25 mil trabajadores hoteleros y que también fue de quienes propuso un aumento de un 40%, un gran hotel puede pagar menos que una mediana empresa del sector no sectorizado o una pymes.

A manera de ejemplo, con los aumentos salariales registrados este 2021, una gran empresa (no sectorizada) ahora paga un salario mínimo de RD$21,000, mientras que un gran hotel, su salario mínimo a pagar es RD$14,000.

El nuevo monto establecido en la resolución 02-2021  se fijó mediante acuerdo firmado por la Asociación Nacional de Hoteles y Turismo de la República Dominicana (Asonahores) y el sector sindical representado por la Federación Nacional de Trabajadores de Hoteles, Bares y Restaurantes (Fenatrahorets) y la Unión Nacional de Trabajadores de Hoteles, Restaurantes, Alimentación y Afines (Unatrahorest), presentada al Comité Nacional de Salarios (CNS).

Propina legal

La llamada propina legal en el mundo hotelero es vista como una compensación, ya que muchos empleados pueden ver "mejorado"  el sueldo cuando lo reciben, dado que la mayoría devenga un salario mínimo, que hasta hace poco era de RD$ 10 mil 300 .

Según Pepe Abreu, la propina legal se utiliza en ocasiones por el empresariado como un instrumento a favor de mantener el bajo salario "pero tratando de hacer perder de vista que ese 10% no lo pagan ellos", porque es un aporte del cliente.

Sin embargo, desde hace semanas  hay quejas de que el 10% de la propina no se está entregando completa a los empleados. Una denuncia al Ministerio de Trabajo la hizo Jacobo Ramos de la Central Nacional de Trabajadores (CNTD), pero sin aparente seguimiento o resultado de la misma.

Una de las supuestas causas es que a diferencia de las centrales que firmaron el acuerdo salarial, como el caso de la CNUS que representa unos 20 mil empleados hoteleros, la CNTD no tiene gran representatividad en ese sector.

“El pago del salario es como en otros hoteles, mínimo, pero el 10% no lo están proporcionando como lo establece el Código Laboral ya que allí existe un monopolio con el sindicato que está para supuestamente defender los derechos de los trabajadores y no lo hace, mejor le dan la espalda a esos colaboradores”, se queja Tony Felipe, socorrista hace más de cuatro años en un hotel en Bávaro.

Sostiene que aunque le gusta su trabajo ve como un atropello que no se les pague el porcentaje de propina completo, además de otras situaciones que afirma han estado ocurriendo en la cadena hotelera donde trabaja, como tener que costear el uniforme de trabajo del salario de los trabajadores.

El presidente de la Federación Nacional de Sindicatos Unificados (FENASU), Máximo Donato Guillén, también ha sido de los que denuncian desigualdad salarial, "mafia" sindical, falta de pago del 10% de propina, entre otras faltas dentro de hoteles en Punta Cana, Bávaro y Puerto Plata. "Esa desigualdad salarial se debe a que por 25 años en los sectores hoteleros opera una mafia sindical y a la cual se debe poner un stop", asegura.

Dijo que muchos de estos sindicatos están bajo la directiva de supervisores y encargados departamentales en las cadenas hoteleras, lo que es una violación al código.

Art. 328. Código Laboral dice que los directores, gerentes o administradores de una empresa no pueden ser miembros de un sindicato de trabajadores. Tampoco pueden serlo quienes desempeñan funciones de dirección, inspección, seguridad, vigilancia o fiscalización, cuando tienen carácter general o que se relacionen con trabajos rendidos directamente al empleador.

Un sector en crecimiento

El turismo ha sido una de las actividades económicas de mayor crecimiento y recuperación después de la reapertura. Solo este año los proyectos hoteleros e inmobiliarios aprobados por el Confotur superan los 147 en unas 10 provincias del país.

Estos proyectos representan una inversión de acuerdo con el Ministerio de Turismo de unos US$ 5, 302 millones. En noviembre se aprobaron cuatro nuevos proyectos turísticos con inversiones estimadas de US$91 millones concentrados en las provincias de La Altagracia, La Romana y Samaná.

El turismo vive un notable auge.

Solo en el mes de septiembre, las compras del sector ascendieron RD$16,345 millones. Estas compras fueron en comercios, transporte y almacenamiento, electricidad, agua y gas. También generó impuestos de RD$3,3321 millones  en ITBIS (47%), salida de pasajeros (13%) e impuestos sobre los activos (9%).

De acuerdo con el ministro de Turismo, David Collado, el turismo continua avanzando en su recuperación a niveles de antes de la pandemia. Desde enero a noviembre han llegado al país 4,263,259 no residentes, de ellos 519,349 en el último mes generando un estimado de ingresos de divisas de US$575 millones.

Recuperación Turismo enero-noviembre 2019 vs 2021

Se ha recuperado el 73% de los turistas según MITUR

Las condiciones laborales y el salario de los trabajadores del turismo son alarmas de atención, en un sector que aporta el 30% del crecimiento de la economía dominicana y del que las autoridades se sienten muy orgullosas por las cifras de recuperación y la cantidad de empleos que levanta.