El documento no oficial de reforma fiscal que circula desde el pasado fin de semana, establece una serie de modificaciones en la carga impositiva de las empresas y tocaría sectores en específicos que han sido ampliamente beneficiados con exenciones.
La propuesta para la simplificación tributaria establece la eliminación para personas físicas y las Mipymes del anticipo y una reestructuración de este esquema para las personas jurídicas.
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Pero los mayores cambios para las personas jurídicas, dígase, las organizaciones e instituciones ya formalizadas, se encuentra en el Impuesto Sobre la Renta (ISR) que pagan las empresas.
"Se incrementa transitoriamente la tasa de Impuesto Sobre la Renta a personas jurídicas a 30 % en los tres años siguientes a la aprobación de la reforma, retomando a 27 % al final de este plazo", describe el documento no oficial.
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Igualmente, derogaría la disposición de la Ley 158-01 de Fomento al Desarrollo Turístico referente a la exoneración del 100 % de ISR para las personas físicas o morales que vivan en el país y emprendan, promuevan o inviertan en actividades y lugares relacionados con el turismo. También la posibilidad de que estas personas puedan deducir o desgravar de su renta neta parte del monto de sus inversiones en proyectos turísticos.
"Se deroga el artículo 50 de la Ley 392-07 sobre Competitividad e Innovación (Proindustria)". Este artículo estableció en 2007 un régimen transitorio de cinco años para las industrias, que entre otras facilidades, dispuso la deducción de hasta el 50 % de la renta neta a inversiones realizadas en la compra de maquinaria, equipo y tecnología.
La Dirección General de Impuestos Internos define el Impuesto sobre la Renta (ISR) como el impuesto que grava toda renta, ingreso, utilidad o beneficio, obtenido por personas físicas (profesionales, comerciantes, etc.) o jurídicas, que son las instituciones u organizaciones. |
Deroga diversas exenciones
Otra exención que quedaría derogada es el pago de ISR para la industria textil. Precisamente este martes, la Asociación de Industrias de República Dominicana (AIRD) emitió un comunicado en el que planteó su rechazo a una reforma fiscal apresurada, que terminaría por afectar la recuperación económica.
Las exenciones del pago del ISR quedarían derogadas igualmente para los colegios y universidades privadas, y para la Ley de Fideicomiso y Desarrollo Inmobiliario, aunque mantiene el bono ITBIS.
Igualmente, aumentaría al 5 % el impuesto de venta al mercado local de las empresas de Zona Franca y graba con ISR las actividades dentro de los parques de zonas francas.
Estas modificaciones que recaerían especialmente sobre las grandes empresas se traduciría en una recaudación de 19,401 millones de pesos, de acuerdo siempre con el documento que el Gobierno ha asegurado no divulgó.
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