En la primavera de 1967, durante mi primer entrenamiento en Guerra de Guerrillas compartí aventuras y vivencias en las lomas de Pinar del Río en el occidente de Cuba con varios dominicanos, chilenos, cubanos, haitianos y argentinos. Uno de ellos era un compueblano a quien en Cuba pusieron el nombre de Ardelio López. El prologó mi libro ENIGMA e hizo aportes importantes al texto y a las ideas. El es uno de esos talentos que brillan por su ausencia en los grandes medios de comunicación dominicanos. A raíz de mi artículo titulado UÑAS Y DIENTES el escribió las notas que a continuación y con su autorización reproduzco.

¡Un artículo de precisiones aritméticas!

No estoy en el cerebro de Danilo Medina para saber si, al comienzo de su gobierno, tenía o no buenas intenciones con lo que hacia y decía.

Si de verdad pensó enfrentarse a la Barrick Gold para negociar un nuevo contrato más beneficioso para el país; si quiso impulsar y ayudar a los pequeños productores con sus "visitas sorpresas"; si quiso realizar una verdadera "revoluciòn educativa"; si en serio estableció el concurso y selección de las obras del Estado para obrar con Justicia. De esto sabrá él mejor que nadie qué pensé, qué hizo, qué le dejaron hacer y qué quiso hacer.

La verdad es que si operó maliciosamente para engañar e inducir en la opinión de la gente un cambio en la forma de gobernar, en principio lo logró, pero ya, al final de su gestión, las cosas le han salido al revés, y para muestra, ahí está la descripción en tu artículo.

En el mejor de los casos, esto es, si tuvo buenas intenciones, se cumple el dicho de que no se pueden obtener resultados buenos basándose en recursos malos o ilegítimos. Como dice el dicho alemán, "El fin no justifica los medios". Al final, la casa se viene encima y todo se arruina.

¿Qué puede pasar ahora?  No siempre las circunstancias están en favor de una determinada corriente de cambio. Por ejemplo, nosotros en el pasado, luchamos con las circunstancias en contra. Ahora,  las circunstancias se están expresando en favor del cambio contra el PLD.

¿Estarán conscientes los opositores de esta realidad? ¿Por qué no se unen? ¿Por qué no logran establecer el frente opositor? Solo la cristalización de esta aspiración, más la buena disposición por el cambio que pueda tener Washington y el coraje de los líderes de la oposición unida contra el fraude, puede crear la muralla infranqueable donde debe estrellarse el PLD y toda su caterva de zánganos y ladrones.

Tuyo, como siempre.

A.