Si existe la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), creada para sustituir la inmundicia del narcotráfico policial en gran escala; si, como se sabe, la Dirección de Narcóticos (DICAN) fue restablecida, en competencia con la DNCD, para restituir la gran ración del boa rameado; si está vista y demostrada la infuncionalidad de ese absurdo, ¿qué espera Danilo Medina para abolir tal engendro? Por lo que la gente, asombrada ante el misterio, pregunta si un par de generales y coroneles de hojalata pueden tener más poder que el Presidente de la República.