Uno de los aspectos que identificaron los seis años de gestión “socialista” del pasado alcalde Santiago de los Caballeros, Juan Gilberto Serulle Ramia, fue su improvisación y su anhelo de construir obras de infraestructura que no estaban contempladas en las prioridades demandadas por los munícipes.
“Para muestra un botón”, en la gestión municipal que terminó el 16 de agosto del 2016, Gilberto Serulle intervino una parte del sector Los Pepines, en Santiago de los Caballeros, donde se levantaron, apartamentos y otras infraestructuras, en el área verde del proyecto de la Avenida Ecológica, entre Los Pepines, El Retiro y Nibaje. Pero estas obras, en las cuales se invirtió la suma de RD$36 mllones, fueron dejadas a medias y abandonadas. Hoy están cubiertas por las malezas.
Este proyecto, situado en la zona que se conoce como la Avenida del Arroyo, está arropado por los matorrales, sin que se conozca un reporte oficial de las inversiones y cuál será decisión que tomará la nueva gestión del alcalde Abel Martínez Durán. Las imágenes del reportero gráfico Federico Basilis muestran cómo los caballos y otros animales han hecho de la construcción abandonada su hábitat.
La inversión
El ex regidor del Partido Acción Liberal (PAL), Domingo Ureña, dijo que se trata de obras no planificadas, que nada tenían que ver con las prioridades de Santiago de los Caballeros, sin con la decisión personal de Gilberto Serulle, sin consultar a ningún sector de la municipalidad.
Según Domingo Ureña, solo en estas obras abandonadas en la Avenida del Arroyo hay una inversión de RD$ 27 millones, a lo se suman otros RD$ 9 millones, que se habrían entregado a nombre de la Unión Europea, para un total de RD$36 millones.
Ureña denunció que en la lista de obras hay trabajos que fueron pagados y que ni siquier fueron comenzados por los beneficiados con los contratos.
Agregó que las autoridades actuales deben hacer cuanto antes una evaluación de estas obras dejadas a medias, y se establezcan las debidas responsabilidades de los contratistas.
Dijo que, sobre todo, se debe determinar cuánto ha costado hasta el momento cada obra dejada en abandono o no comenzada, porque el dinero invertido es propiedad de ciuadanía de Santiago.