Santo Domingo, República Dominicana (EFE).- El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, felicitó a República Dominicana por los avances logrados en su política migratoria.
Al participar en un foro en la Cancillería dominicana por la celebración del 70 aniversario de la firma de la Carta de la OEA, Almagro se refirió a los resultados obtenidos por la nación caribeña en esta materia con la regularización, "prácticamente no alcanzados en proporción por ningún otro país del continente", por lo que "debe servir de ejemplo para todos".
También congratuló al país por "sus importantes avances" en la consolidación del sistema democrático y por ser un referente dentro del sistema interamericano.
Por su parte, el canciller dominicano Miguel Vargas, valoró la nueva actitud de la entidad regional hacia el país, sacándolo del capítulo IV-B de su informe anual sobre derechos humanos.
Al sacar a la República Dominicana de la lista, comenzó una etapa de excelentes relaciones entre el país y el organismo hemisférico, gracias a que "hay una nueva política exterior del Estado dominicano que prioriza la defensa de nuestros intereses a través de una diplomacia proactiva basada en resultados", dijo el ministro.
Vargas aseguró que la política migratoria dominicana "podría enmarcarse como un hito en la región, al sentar un régimen de regularización de migrantes para miles de extranjeros que viven en el país."
Atrás quedó -aseguró Vargas- la desconfianza que generó el aval que la OEA dio a la intervención militar estadounidense al país, en 1965. Hecho "bochornoso y lamentable", en palabras del canciller, por el cual el organismo regional aprobó una Declaración de Desagravio en 2016.
Durante su intervención sobre el pasado y futuro de la OEA, su secretario regional en sus 70 años de historia, a pesar de los dificultades, y afirmó que "continúa siendo una organización de calidad para defender la democracia y los derechos humanos".
Desde la OEA "hay que continuar con el esfuerzo para ponernos más cerca de los pueblos", la organización "debe ser lo que los pueblos quieran que sea", manteniéndose a la altura de sus principios y corrigiendo errores que se hayan cometido, afirmó.
Asimismo, destacó que "los que viven en dictadura deben saber que cuentan con la OEA" y que la complicidad hacia las dictaduras no tienen cabida en la organización, ya que "empujan a los países al precipicio" y, son "indefendibles". EFE